La campaña de prevención de seguridad ciudadana en zonas de ocio de Gijón por parte de la Guardia Civil se saldó esta Semana Santa casi medio millar de pruebas de alcoholemia a conductores y otras quinientas inspecciones de tráfico de estupefacientes, tenencia de armas y falta de documentación. Ocho conductores dieron positivo y uno fue detenido como resultado.

Por su lado, la Policía Local detuvo también en Semana Santa a 13 conductores acusados de un delito contra la seguridad vial, 12 de ellos por conducir bajo los efectos del alcohol y el otro por circular sin puntos en el carnet. Se denunciaron a cuatro establecimientos por no cumplir su horario de cierre.