Los trabajadores de Tuinsa Norte responderán con movilizaciones si los gestores de la empresa no les ofrecen una solución a la situación en que se encuentran, sin cobrar sus nóminas y con la actividad fabril paralizada al no pagar la empresa el gas necesario para soldar y con servicios básicos cortados por impago, como el de telefonía y el de Internet.

La plantilla celebró ayer una asamblea a la que asistieron los máximos responsables de la Federación de Industria de CC OO en Asturias, sindicato con mayoría en el comité de empresa de Tuinsa. Los sindicatos mantendrán una nueva reunión negociadora con los dueños de Tuinsa el próximo lunes y en función del resultado de la misma habrá movilizaciones o no.

Tras la asamblea, el secretario general de la Federación de Industria de CC OO en Asturias, Damián Manzano, señaló que no están dispuestos a que se prolongue "la agonía" de la empresa. Manzano agregó que en la reunión del lunes con los gestores de Tuinsa, "esperamos que nos digan cómo van a hacer frente al impago de los salarios y de la deuda que tiene la empresa y qué intenciones tienen a futuro para los trabajadores y la actividad, porque no creemos en las soluciones que nos están planteando, que no son viables".

La plantilla de Tuinsa está inmersa en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que afecta a la mitad de los trabajadores. En la última reunión con los sindicatos, los responsables de la empresa propusieron hacer un nuevo ERTE, para enviar al paro durante tres meses a toda la plantilla, dijeron que pagarían las nóminas atrasadas con los cobros a clientes de facturas pendientes y anunciaron la posibilidad de una ampliación de capital de 6 millones de euros, condicionada a que fructifiquen las negociaciones con los bancos.

Unas medidas que no se creen los sindicatos, que en esa misma reunión pidieron a la empresa que presente un concurso de acreedores y que el lunes le plantearán negociar un ERE para la extinción de todos los contratos.

Manzano sospecha que lo que realmente pretende la dirección de Tuinsa es "la agonía para que la gente acabe saliendo por la puerta de atrás sin sus derechos ni salarios". Tuinsa Norte cuenta en la actualidad con 69 trabajadores, después de que en las últimas semanas hayan abandonado la empresa de forma voluntaria una decena más, para irse a trabajar a otras compañías. Esa salida voluntaria supone que los trabajadores se quedan sin cobrar la indemnización que les correspondería por despido, sin derecho a cobrar el paro en el caso de que no encontraran otro trabajo, y con incertidumbre respecto al cobro de los salarios pendientes. Desde CC OO se insiste en que "no estamos dispuestos a consentir que la gente acabe saliendo por la puerta de atrás a base de que les deban 6 o 7 nóminas" como estrategia para forzar a que acaben yéndose, sin derechos, por desesperación.

"Los empresarios están desaparecidos, abandonando sus obligaciones y el pago de los salarios", recalcó el dirigente sindical, que calificó de "desastre" la gestión de la empresa. Tuinsa fue vendida en diciembre a una firma con 3.006 euros de capital social. Los trabajadores cumplen hoy su decimotercer día de encierro en el taller para evitar que se lleven la carga de trabajo que les queda a otras empresas y para reclamar que les paguen.