El único tripulante del velero "Galene of Orwell", con pabellón británico, tuvo que ser rescatado ayer de emergencia después de que su embarcación encallase en una zona de rocas próxima al faro de mar que da entrada al Puerto Deportivo de Gijón, justo en frente de la playa de Poniente. El marinero, que sufrió solo pequeñas contusiones, tuvo que ser socorrido por los miembros del "Helimer" de Salvamento Marítimo, descolgados desde el helicóptero, puesto que las embarcaciones de rescate no podían acercarse a la zona del hundimiento por la pronunciada bajamar que acompañaba.

El accidente marítimo tuvo lugar sobre las diez y media de la mañana de ayer. El patrón del velero acababa de salir del Puerto Deportivo y, de pronto, comenzó a fallar el motor de su embarcación, de once metros de eslora, hasta que se paró. Fue entonces cuando el hombre trató de regresar a puerto, pero el fuerte viento y el oleaje le llevaron directo a la zona de rocas -sobresalían del agua ante la pronunciada bajamar de esa hora- próximas al faro hasta que encalló. Fue entonces cuando emitió la señal de socorro por radio y se desplegó todo el operativo de rescate.

La embarcación "Salvamar Rigel" de Salvamento Marítimo y el barco de la Guardia Civil trataron de aproximarse para rescatar al tripulante. Pese a que la bajamar estaba prevista para las 12.35 horas, había ya escasísimo calado en esa zona rocosa próxima al faro. De ahí que tuviesen que movilizar al equipo del "Helimer". Rápidamente llegaron y uno de sus rescatadores se desenganchó para socorrer al marinero, que había saltado del barco a las rocas. La rápida intervención de los miembros del helicóptero facilitó la evacuación hasta el hospital del tripulante, con frío y varios rasguños.

Al subir la marea dejó al barco a flote, pero el golpe que sufrió contra las rocas había provocado una vía de agua en el caso y poco después se hundió casi por completo. Se veía el mástil apenas. Ahí estaban en plena intervención los rescatadores de Cruz Roja, que se encargaron de hacer firme el remolque -y luego quitarlo antes de hundirse- y limpiar el agua de todo el material del velero. El barco, que llegó a Gijón el pasado 20 de agosto y que nunca antes había navegado por la costa gijonesa, tenía combustible a bordo y fue soltando pequeñas cantidades que se dispersaron sin problemas. De ello se encargaron los rescatadores de Cruz Roja.

Todo el dispositivo de rescate desplegado ayer por la mañana generó, pese a la incesante lluvia, una gran expectación desde los distintos espigones de la zona de Poniente. En los próximos días se intentará sacar de ahí al "Galene of Orwell", que se reflotará presumiblemente mediante buzos con globos.

Punto trágico

Punto trágicoEl punto en el que encalló este velero con bandera británica, conocido como rocas de Serrapio, es la misma zona en la que perdieron la vida el niño Gonzalo Fernández, de 10 años, y su tío Luis Carlos Menéndez, después de que la embarcación en la que navegaban volcase allí. Otros miembros de su familia que iban a bordo lograron salvar la vida. Fue un tráfigo suceso que conmocionó la ciudad en las navidades de 2011. Además, las labores de búsqueda del cuerpo del pequeño, que murió ahogado, se prolongaron durante catorce días hasta que apareció a cien metros del muelle de la Osa.

Las espectaculares imágenes del rescate del tripulante de un velero británico que encalló en Poniente tras fallar su motor

Las espectaculares imágenes del rescate del tripulante de un velero británico que encalló en Poniente tras fallar su motor