El skater mallorquín Jaime Mateu ha sido condenado por la Audiencia Provincial. Al deportista de 24 años se le acusaba de haber provocado en marzo de 2018 un altercado contra agentes policiales en el bar El Chamizu (calle Jacobo Olañeta) en compañía de otros tres jóvenes, de los que finalmente solo ha resultado absuelto uno. Todos los acusados defendían que la respuesta policial había sido "desproporcionada" y que ellos solo trataban de defenderse.

Mateu se afrontaba a dos años de cárcel por un delito de atentado contra la autoridad y lesiones del que finalmente ha sido absuelto porque, según el magistrado, el propio agente que resultó herido de mayor gravedad aquel día declaró que sus lesiones las había provocado otra de las acusadas y que el comportamiento del implicado, aunque sí trató de impedir su detención y le grabó con el móvil, no llegó a agredirle físicamente. Ha sido, por tanto, condenado a nueve meses por el citado delito de resistencia en el que concurre, además, el agravante por reincidencia. La defensa de Mateu había tratado de evitar la condena en el juicio celebrado el pasado mes de octubre alegando que el joven había consumido cocaína y que no era consciente de la gravedad de sus acciones.

S. G. L., por su parte, se enfrentaba a dos años de cárcel por su enfrentamiento con la policía. Su defensa solicitaba la libre absolución basándose en que la joven, "una chica de 50 kilos", no sería capaz de poder físicamente contra dos agentes, que habían declarado que se había abalanzado contra ellos, derribándolos al suelo, al grito de: "Yo no hago caso de estos putos cerdos hijos de puta". Tendrá que afrontar los citados dos años de cárcel por un delito de atentado y de lesiones y tendrá que indemnizar a uno de los policías heridos con 5.500 euros y a su aseguradora con otros 2.277. La acusación particular en nombre de los agentes la ejercieron los letrados Guillermo Calvo y Sylvia Garrido.

Otro de los acusados, C. I. G., ya había reconocido los hechos el día anterior y se conformó con seis meses de cárcel por atentado y otros tantos meses por lesiones, así como al pago de 3.740 euros de indemnización a los policías. La Audiencia ahora ratifica la condena.

El cuarto implicado, por último, responde a las iniciales I. V. F. y se enfrentaba a un delito contra la salud pública por haber sido intervenido con diez papelinas de cocaína. Durante el juicio -al que llegó con hora y media de retraso-, declaró que todas las sustancias eran para consumo propio. El magistrado ha dado por buena la versión y lo absuelve.