Cristian Guisado, (Gijón, 1989) es el presidente de Asociación de Vecinos de El Coto, cargo al que llegó hace un año al relevar al histórico representante vecinal Óscar Piñera, que ocupó el puesto durante alrededor de cuatro décadas. Ahora, Guisado, encabeza a sus 30 años una directiva de diez miembros, de variada edad. Sus retos principales son la reforma de la plaza de la República y dinamizar un barrio para el que la asociación ya logró recuperar sus fiestas el pasado año.
-Cumple un año como presidente. ¿Cómo valora su gestión?
-Como una gestión plural. No es cuestión de una persona sola, sino del grupo que forma la directiva. Cuando llegamos esto era un desierto. Poco a poco, hemos ido sacando cosas adelante. Los vecinos se han integrado y eso es positivo. Queda mucho por hacer. Tenemos las puertas abiertas.
-¿Cuáles son las principales necesidades de El Coto?
-La reforma de la plaza de la República, adecentar parcelas abandonadas y mejorar la iluminación de algunas calles. Hay veces que tengo que dar la luz del móvil porque no se acierta a meter la llave en el portal. En cuanto a cultura, también estamos moviendo el tema; y organizando en solitario un ciclo de teatro costumbrista.
-La reforma de la plaza de la República está en marcha. Valdrá 250.000 euros y el Ayuntamiento tendrá en cuenta a los vecinos para la obra. ¿Qué necesita esa plaza?
-Queremos que los vecinos tomen parte en lo que va a ser la plaza. Hay ideas, y en primavera vamos a levantar espacios de participación abiertos y al aire libre para implicar a pequeños y mayores. De momento, solo hay pinceladas.
-¿Alguna en concreto?
-Los vecinos reclaman zonas de sombra que ahora mismo no hay; también espacios para parques más acondicionados. Queremos que la plaza de la República sea el centro del barrio y no lo que es ahora, un lugar soso y gélido.
-Y con bancos con la bandera arcoíris.
-Así es. El Coto es un barrio abierto y no tiene prejuicios contra nadie y contra nada. Puertas abiertas para todo el mundo.
-¿Cómo es su relación con el Ayuntamiento?
-Tenemos mucho contacto con Dolores Patón, la presidenta de nuestro distrito, y con Olmo Ron, el edil de Obras Públicas. Tienen buenas vistas para El Coto. Pero estamos más disgustados con Alberto Ferrao, de Cultura, que no ha querido apoyar algunos proyectos como el ciclo de teatro o los cancios de chigre, que recuperamos este año para la semana anterior a las fiestas. Aurelio Martín, de Medio Ambiente, quedó el año pasado de hacer una visita para discutir un proyecto sobre el carril bici, pero seguimos esperando.
-¿Le perjudica o beneficia su juventud?
-Llevo muchos años en el asociacionismo, pero estoy aprendiendo muchas cosas. Con la Federación de Vecinos tuvimos nuestros más y nuestros menos, pero confiamos en Manuel Cañete, el presidente. Estamos seguros que vamos a trabajar todos por un Gijón mejor.