Las familias de los niños de Nuevo Roces que van al colegio Noega y al Nicanor Piñole han estallado por las constantes deficiencias en el transporte escolar. Esta mañana se concentraron de forma masiva en la parada del barrio para reclamar que todos los niños tengan plazas suficientes en el autobús escolar, que no tengan que viajar juntos cuando son de centros diferentes y que el cambio de monitores acompañantes sea el mínimo.

Además, arropados por las AMPAS, las direcciones de los centros escolares y la asociación de vecinos de Nuevo Roces, reclamaron también que las paradas se distancien para evitar aglomeraciones, y para no coincidir con las paradas de EMTUSA. El presidente vecinal, Miguel Bernardo, fue el encargado de leer un manifiesto en el que pidieron también una reunión urgente con todas las partes para exigir medidas.