Luz verde a las nuevas ordenanzas fiscales o prorrogar las del año pasado. Es la cuestión a la que se enfrentarán hoy el gobierno local y los grupos de la oposición en el Pleno que se celebrará por vía telemática y en el que se prevé conflicto político y jurídico. El principal de punto de tensiones está en la enmienda presentada por Foro que permite suprimir el IBI a los hosteleros, a lo que solo se opone el gobierno local, y que un informe de la Secretaría considera una ilegalidad. "Está en sus manos decidir si resolvemos esta situación y podemos tener unas ordenanzas que atiendan a la situación actual o si nos van a obligar a retirarlas del Pleno y por tanto mantener el IBI diferenciado como hasta ahora", advierte la edil de Hacienda, la socialista Marina Pineda, que declina apoyar esta propuesta. "Ya hicimos un esfuerzo muy importante al suspender el IBI diferenciado, que supuso una merma económica de dos millones; no pueden pedirnos que aprobemos, apoyemos y apliquemos unas normas fiscales que están viciadas desde su inicio", reflexiona la edil.
En cambio, la oposición, pese a coincidir en el respeto a la legalidad, se han pasado el fin de semana examinando el informe de la Secretaría, que recibieron el viernes. No renuncian a encontrar una fórmula que avale la ayuda que pretenden a la hostelería. "Estamos viendo una opción para salir de este embrollo y cumplir con el sentimiento general que permita paliar los efectos de la crisis a la hostelería", estima Rubén Pérez Carcedo, de Ciudadanos. En Foro, autores de la enmienda, reprochan que si no era legal su propuesta "¿por qué se admitió y se dejó votar", relata Jesús Martínez Salvador, sin concretar qué postura mantendrán hoy.
En el PP, Ángeles Fernández-Ahuja aporta que "la mejor solución es buscar lo más útil para los gijoneses", y eso implica "soluciones concretas y viables". En Vox, ven "prioritario" aliviar la presión fiscal de los gijoneses, especialmente con los hosteleros, mientras que en Podemos-Equo mantiene sus críticas al gobierno, al que acusa de "ampararse en aspectos técnicos en lugar de aportar soluciones políticas al conflicto". Los nuevos tributos están en el aire.