La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Descartado el proyecto del parque de animales tras el recelo del Ayuntamiento

La empresa Rain Forest priorizará la reforma del Acuario y el gobierno local le pide cambiar sus primeros bocetos para la nueva fachada

Vista aérea del Acuario de Gijón.

Rain Forest, la empresa encargada de la gestión del Acuario, ha descartado su propuesta para poner en marcha un parque de animales de 40 hectáreas en Gijón para centrarse solo en la reforma del centro de Poniente, tras los recelos del gobierno local y del Principado a este plan. El Ayuntamiento quiere apuntalar el futuro del Acuario y estudia rebajar el canon de explotación y aumentar la duración del contrato que liga a la firma con el centro. El Consistorio ha pedido a la firma darle una vuelta al aspecto del recinto, cuyos primeros bocetos, basados en el Liverpool fabril del siglo XIX, no encajan en los planes municipales para la reforma del aspecto de la fachada marítima. “El bioparc solo era una idea, nada más. La prioridad sigue siendo la reforma”, aseguró ayer el director del centro, Alejandro Beneit.

La propuesta de crear en Gijón un gran parque de animales la anunciaron los responsables de la firma este miércoles. Se trataba de una actuación paralela a la gran reforma del Acuario. El empresario manifestó que, para que el plan saliera adelante, sería “necesario” contar con el apoyo del Ayuntamiento y del Principado. Un apoyo que ninguna de las dos instituciones prestarán. El gobierno local solo considera una prioridad la ampliación del centro de Poniente y ha reiterado su compromiso y el del Principado para que la obras, presupuestadas en 20 millones de euros, se financien con fondos europeos.

Ante esta tesitura, Rain Forest ha decidido plegar las alas y centrarse en sacar adelante la ampliación del Acuario. Para ello, la firma está pendiente del futuro de las fincas que tienen la Autoridad Portuaria y la sociedad de Astilleros Pymar entre la playa de Poniente y Mariano Pola. En esas dos hectáreas, se asentarán los nuevos equipamientos, entre los que se cuenta el centro para la recuperación de especies marinas. Su disposición aún no está definida. “Conocer el futuro de esas dos fincas y su recalificación es el primer paso. Creemos que el proyecto encaja por actividad y superficie en ese lugar”, asegura Beneit.

La relación entre Rain Forest y el gobierno local sigue siendo fluida. Maldonado reconoció que existía buena sintonía. Una buena sintonía que puede traducirse en una ampliación del contrato y en una rebaja del canon de explotación. Rain Forest asumió la gestión del Acuario en 2018 durante 15 años con opción a otros cinco. A cambio, paga 119.000 euros anuales a las arcas municipales. Ya en marzo, con el decreto del primer estado de alarma y el confinamiento de la población, el Ayuntamiento sondeó esta posibilidad para paliar la lógica caída de visitantes y en consecuencia de ingresos. Ahora, estas dos opciones vuelven a estar sobre la mesa, en parte para incentivar la ampliación. “Cuando solventemos el tema de los terrenos pasaremos al siguiente paso, pero sí lo hemos hablado”, reconoce el director.

La concesionaria del Acuario ya ha presentado un primer boceto del aspecto final de la reforma al Ayuntamiento. La nueva imagen, explica Maldonado, bebe del Liverpool fabril del siglo XIX y de sus astilleros. Rain Forest propone construir una estatua en la plaza del Acuario de dos grandes ballenas, rellenar espacios interiores con vegetaciones y erigir varios murales representativos de la fauna marina en la entrada del centro. El color predominante en esa primera aproximación es el marrón y en los dibujos se refleja a grosso modo la cúpula del centro y los nuevos equipamientos, así como algunas peceras para las especies. “Hicimos un diseño como si fuera un invernadero del siglo XIX que se había derruido y se inundaba”, explicó José Maldonado en su entrevista con este periódico.

Esta primera aproximación a lo que será el aspecto final del Acuario no encaja en los planes que el Ayuntamiento tiene para la reforma de la fachada marítima y ha pedido a la concesionaria darles una vuelta de tuerca para darles un aspecto que encaje con más soltura en la ciudad. A lo largo de los próximos días, tanto Rain Forest como el gobierno local seguirán manteniendo contactos para caminar de la mano en la reforma del Acuario. Una reforma que vuelve a centrar las aspiraciones de la concesionaria tras aparcar su proyecto de construir un parque de animales de 40 hectáreas. La firma niega, como también hizo el concejal de Medio Ambiente, Aurelio Martín que para esa idea se haya interesado en el campo de golf del Tragamón, una posibilidad que puso sobre la mesa Foro.

Las claves

  • El bioparc. Rain Forest sondeó estrenar un parque de animales de 40 hectáreas, preferiblemente en el concejo gijonés. 
  • Rechazo. Ni el Principado ni el gobierno local acogieron con entusiasmo la propuesta de la firma para el proyecto. 
  • El Acuario. La concesionaria del Acuario descarta ahora construir el bioparc y negocia prolongar la explotación del centro de Poniente. 

Compartir el artículo

stats