El Juzgado de lo Social número 4 de Gijón ha dado validez al despido de un repartidor de comida a domicilio que se negó a desinfectarse las manos con gel hidroalcohólico antes de recoger un pedido en una establecimiento ubicado en los bajos de El Molinón. La empresa lo consideró como una falta grave y procedió a comunicarle su despido, que el empleado recurrió por la vía judicial sin éxito.

El trabajador despedido se encontraba en el local en mayo del pasado año a la espera de un pedido para llevar. Eran las 21.40 horas. Siguiendo las normas y medidas de seguridad de la empresa, recoge la sentencia, el responsable del local le instó desinfectarse las manos con el gel antes de recoger el pedido, pero este hombre se negó a ello. Tras una discusión entre ambos, el repartidor se llevó el pedido sin hacer uso del gel para luego entregarlo en el lugar indicado. Hechos que el juez ve acreditados y detallados en la carta de despido que ha validado.