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Diez años de la reforma de El Molinón: el estadio con un espacio para la innovación

“La reforma fue un acierto, son todo ventajas”, coinciden las dos empresas informáticas asentadas en el Espacio Tecnológico Molinón

Isabel Lombardía, a la entrada de Espacio Tecnológico Molinón. Ulises Arce

En el estadio más antiguo de España se habla de big data y se desarrollan complejos programas informáticos para multinacionales. Esa mezcla entre lo histórico y lo moderno se conjuga en Espacio Tecnológico Molinón, el área de casi mil metros cuadrados de la esquina noroeste del “templo” rojiblanco, que nació gracias a la última reforma del estadio, hace ahora una década. En ese lugar juegan como locales dos firmas gijonesas que destacan en el desarrollo de software. Son Grupo Espiral MS, que dirige Isabel Lombardía, y Neosystems, fundada por Jonathan Solís y David Zapico. “El Molinón solo nos ofrece ventajas”, coinciden.

El estadio más antiguo y el más puntero

El Espacio Tecnológico Molinón se inauguró el 11 de abril de 2013, aunque surgió del último gran lavado del estadio municipal, que terminó oficialmente el 29 de abril de 2011. Contaba en su origen con cuatro empresas que sumaban ochenta trabajadores. Hoy son dos compañías, que rozan el centenar de empleados y efectúan su labor en la primera planta del complejo. Cuentan con todas las comodidades. Sala de descanso, entorno luminoso, facilidad de aparcamiento, cocina y bonitas zonas de descanso.

Neosystems nació de la mano de Jonathan Solís y de David Zapico en el año 2005. Inicialmente, estuvieron en el Parque Tecnológico y llegaron a Espacio Tecnológico Molinón en 2013. La firma es especialista en desarrollo de aplicaciones web y para móviles y en desarrollo de software de gestión, así como en big data e internet de las cosas. Algunos de sus clientes son el BBVA, el Banco Santander y hasta el Atlético de Madrid. La web colchonera lleva su firma. “La mayoría de nuestros clientes son de fuera. Nos asentamos en El Molinón pensando en nuestros empleados”, explica Solís.

Espiral tiene dos vertientes. Proactivaneto, dedicada al desarrollo de software de inventario para departamentos informáticos de grandes compañías, y una segunda, que lidera con la firma Prosafety, enfocada a la creación de programas para departamentos de recursos humanos y prevención de riesgos laborales. Isabel Lombardía es su responsable y una de sus fundadoras, allá por 1998. “Tardamos cinco minutos en decidir si nos instalábamos en el estadio. Fue la mejor decisión que hemos tomado”, zanja Lombardía. Su empresa tiene casi 100 empleados, de los cuales 70 trabajan en el estadio municipal, y oficinas en México, Chile, Perú y Colombia.

Las ventajas que ofrece el coliseo rojiblanco abundan para las dos firmas. “Tenemos un entorno bien comunicado, con muchos servicios, fácil aparcamiento, hostelería y hasta un gimnasio. Es muy difícil ver en otra zona tantas ventajas juntas”, considera Jonathan Solís. Lo mismo piensa Lombardía, quien estuvo presente el día de la inauguración del complejo. “Es un punto estratégico en un entorno muy agradable. Tenemos el parque Isabel la Católica, la playa de San Lorenzo..., y si viene un cliente es muy fácil indicarle cómo llegar”, evalúa la mujer.

Los dos profesionales coinciden en que la remodelación del estadio de El Molinón fue un acierto. “El entorno es la principal ventaja. Fue una apuesta por una zona que no tenía mucha vida”, expresa Solís. Igual de claro lo tiene Isabel Lombardía. “Antaño esto era una zona degradada y con una mentalidad antigua. No tenía sentido tener una estructura de estas características para usarla solo noventa minutos cada quince días. Ya no hay ningún estadio en el mundo que se plantee con esos parámetros”, postula. “Ahora es un edificio polivalente, donde hay una comunidad de personas que generamos negocio. Es muy típico que empleados nuestros acudan al gimnasio del estadio, por poner un ejemplo”, añade.

Sin ventanas que den al césped, Espacio Tecnológico Molinón tiene algunas curiosidades. Una de ellas la cuenta Solís, que asegura que, en los días de partido, cuando el Sporting marca gol se nota el aliento de la mareona. Ahora, el entorno está más en letargo, primero porque no hay aficionados que llenen el coliseo rojiblanco y segundo porque los empleados de ambas firmas teletrabajan. “Hay gente que está muy loca por fútbol, algunos alemanes todavía recuerdan el Mundial del 82”, finaliza Lombardía. Y es que El Molinón es el estadio más antiguo de España, pero también uno de los más punteros.

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