Prisión provisional, comunicada y sin fianza. El juez envió ayer al centro penitenciario de Asturias al joven de 27 años que propinó el pasado lunes una brutal paliza a un tatuador en el barrio gijonés de Laviada, al que golpeó con una estaca de madera en el cráneo. Según la investigación policial, el ataque se produjo después de que el dueño del estudio se negase a hacerle un tatuaje sin haber concretado previamente la cita. La Fiscalía pidió su ingreso en el penal ante el riesgo de que reincida y a tenor de las heridas de su víctima, ingresado en el HUCA.

Prisión para el joven que dio una paliza con una estaca a un tatuador en Gijón

Al implicado, que se acogió a su derecho a no declarar, se le atribuyen otras tres agresiones. Dos el pasado viernes, cuando propinó un puñetazo a otro hombre en una céntrica terraza de Gijón e hirió a tres de los cuatro policías que participaron en su detención. Y otra, la noche del 5 de mayo, cuando sin mediar palabra le rompió la mandíbula a otro hombre de 29 años en la carretera del Piles al Infanzón, en la parroquia gijonesa de Somió.

Cuenta con antecedentes desde que era menor de edad y seis detenciones anteriores por atentado contra agente de la autoridad lesiones y robos. Se investiga si las últimas agresiones, incluida la del tatuador pudo cometerlas bajo los efectos de un brote psicótico, que le impidiera gestionar la ira.

El caso del tatuador de Laviada se remonta al pasado lunes, cuando sobre las ocho de la tarde accedió al establecimiento en la calle Los Pedregales. Su víctima, un gijonés de 44 años, estaba atendiendo a otra clienta. El implicado solicitó hacerse un tatuaje, a lo que el responsable del negocio se negó instándole a que solicitase cita y definiera el diseño.

Así fue la detención del agresor del tatuador de Laviada

Así fue la detención del agresor del tatuador de Laviada

Ante esta negativa, y tal como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, el joven volvió minutos después y valiéndose de una estaca de madera propinó una paliza al tatuador, que llegó a perder la consciencia. La víctima, cuando se recuperó, pudo ofrecer una descripción ajustada de su agresor, que escapó a la carrera dejando olvidada la estaca. Fue el pasado viernes, cuando en la plaza de Italia, fue detenido.

En paradero desconocido desde hacía días, los agentes le dieron el alto a la salida de una hamburguesería. Previamente, hirió a otro joven en una terraza de la zona Centro. Ofreció resistencia e hirió a tres policías, uno de ellos ya en los calabozos.