Ya es oficial. La anunciada fusión de las comandancias de Oviedo y Gijón de la Guardia Civil dio ayer un paso más tras su aprobación en Consejo de Ministros, un trámite que da pie ahora a una reorganización de las unidades que tras la medida quedan duplicadas y que sigue causando inquietud entre buena parte de las asociaciones de guardias civiles de la región. Estas agrupaciones critican la “total incertidumbre” bajo la que siguen ocultos los detalles de la unificación y algunas ya han decidido solicitar una nueva reunión con Francisco Javier Puerta, jefe de la Zona de Asturias de la Guardia Civil. En concreto, esta cita será solicitada formalmente por la Unión de Guardias Civiles, que asegura que “se empiezan a oír rumores” de posibles recortes. “La plantilla está indignada porque nadie explica nada”, lamenta esta asociación.
El Gobierno estatal detalló después que la aprobación de esta medida en el Consejo de Ministros permite poner ya en marcha “un proceso de reorganización de unidades” del cuerpo que pasará por aplicar “adaptaciones orgánicas a los nuevos puestos de trabajo resultantes” que se llevará a cabo “poco a poco, a medio plazo, de manera que no afecte al personal o solo de manera residual”. Este detalle es el que sigue poniendo en alerta a parte de las asociaciones de guardias civiles, que entienden que con esta coletilla desde la Dirección General se reconoce que no descartan cambios más sustanciales para algunos empleados, aunque sean minoría. “Seguimos en plena incertidumbre sobre cuáles serán las condiciones laborales y cómo dejará eso el tema familiar y la conciliación. Hay compañeros que tendrán que cesar en su destino y que no saben exactamente qué les va a suponer”, concretan desde la UGC.
Los puntos más candentes de la fusión siguen siendo los que primero hicieron saltar las alarmas: cuál será el futuro del Centro Operativo de Servicios (COS) y qué supondrá exactamente la depuración de jefaturas y mandos intermedios que, tras la unión, quedarían duplicados. Sobre el COS, las voces más pesimistas ya hablan de que las jefaturas estiman que pueden sobrar entorno a media docena de efectivos tras unir las unidades de Gijón y Oviedo. “Lo cierto es que no sabemos cuántos compañeros van a tener que cambiar de zona y cesar en su destino, y no nos dieron por seguro que haya sitio para todos en el COS cuando se reunifique. No lo tenemos nada claro que eso pueda ser así. La incertidumbre sigue ahí y nadie confirma nada”, ahonda la UGC, que asevera: “Esto no fue lo que se nos dijo al principio. Nos habían asegurado que todo iba a ser fenomenal y que no iba a afectar a nadie”.
“Esto no fue lo que se nos dijo al principio. Nos habían asegurado que todo iba a ser fenomenal y que no iba a afectar a nadie”
Una impresión similar lanzan desde la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), que reconocen que “sigue habiendo la misma incertidumbre que el primer día”. “Lo más seguro es que pedir otra reunión ahora solo serviría para volver a escuchar lo que ya nos habían dicho, que era que no se iba a mover a nadie. Eso sigue siendo contradictorio, porque quedarán unidades duplicadas, pero no parece que tengan ningún detalle más. Toca quedar pendientes porque nuestra prioridad va a ser que la fusión no afecte a los agentes, al personal”, adelantan. Otras entidades como la Asociación Profesional de Cabos (APC) también han mostrado su interés de acudir a todas las nuevas reuniones que se convoquen e inciden en la misma sensación de incógnita respecto a cual será el futuro del cuerpo en la región.
El Consejo de Ministros señala que su acuerdo tiene el “objetivo de mejorar el servicio a la ciudadanía y homologar su organización al resto de las comunidades autónomas uniprovinciales” y se acoge al real decreto 367/1997, tal y como ya había explicado Delegación de Gobierno y la Dirección General de la Guardia Civil este mes. Esa normativa pide hacer coincidir la demarcación de cada zona con el territorio de una sola comunidad autónoma y la demarcación de cada comandancia con el territorio de la provincia. “Pero Cádiz sigue teniendo dos, con la de Algeciras”, aseveran desde la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), que sigue siendo la más crítica con una medida que tildan de “vergonzosa”. “No va a suponer una mejora para el ciudadano porque los puestos que se ahorren no los van a dirigir a nuevas patrullas. Tenemos unos 1.950 efectivos sobre un catálogo de 2.050. Y necesitaríamos sumar otros 200. La fusión va a servir como excusa para que se vea adecuado dejar al cuerpo con 1.900, y eso la ciudadanía lo va anotar”, aseveran desde el grupo. “Aquí va a sobrar gente, no hay otra. Contrueces acabará perdiendo parte de su vida”, concluyen.
