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La lucha contra el tráfico de drogas en Gijón deja este año 40 arrestos y 11 focos desmantelados

Las labores policiales permiten incautar 11,7 kilos de cocaína y otros 6,5 de hachís y la clausura de seis bares | Las denuncias vecinales, claves

Un agente, junto a un perro de la unidad canina, revisando una de las viviendas de los implicados en la “operación Clave”, en Pumarín. | CNP

Cuarenta personas detenidas, once puntos de venta desmantelados por toda la ciudad y la desarticulación de hasta tres organizaciones criminales dedicadas a la venta y distribución de drogas en el concejo es el balance de la lucha contra el narcotráfico en Gijón este año que está a punto de concluir. Las labores llevadas a cabo por el Grupo de Estupefacientes de la Policía Nacional –la última de ellas, esta misma semana, permitió clausurar un establecimiento hostelero del barrio de Ceares y el arresto de dos individuos– se ha saldado con la incautación de 11,749 kilos de cocaína, otros 6,543 kilos de hachís y 13 kilos de sustancias de corte, así como 1.455.850 euros provenientes del mercado ilícito. Dos de las principales actuaciones, desveladas ambas por LA NUEVA ESPAÑA, fueron el arresto el pasado mes de mayo de todos los integrantes de un grupo organizado compuesto por hasta 15 miembros que operaban desde pisos y bares repartidos por Pumarín, Ceares, El Coto, El Llano y El Bibio, y la detención de Jesús María Menéndez Suárez, conocido popularmente como padre Chus, al que además del delito contra la salud pública se le atribuye otro más por corrupción de menores. Esa causa continúa bajo secreto de sumario.

El tráfico de drogas es, junto a los robos con violencia e intimidación, el único comportamiento ilícito que ha bajado en Gijón durante este año. Al menos, es lo que refleja la estadística de criminalidad por habitante y que elabora trimestralmente el Ministerio del Interior. Este tipo de delitos, donde las denuncias ciudadanas son el principal punto de partida para los agentes, había caído un 25,5 por ciento hasta el mes de septiembre. Es una tónica que previsiblemente se mantenga también en lo relativo a octubre, noviembre y diciembre, que se saldaron con dos operaciones policiales contra la venta de estupefacientes.

La principal operación, por el elevado número de implicados en la red, llevó por nombre “Clave” y se desarrolló en dos fases. En la primera cayeron nueve personas, se registraron cinco domicilios y cuatro bares y se aprehendieron 1.380 gramos de hachís. En la segunda, fueron seis personas más las detenidas y dos los kilos intervenidos de hachís. Se hallaron además 50 gramos de cocaína tras registrar otras dos viviendas y otros dos establecimientos hosteleros. De los 15 detenidos –todos tenían edades de entre 27 y 54 años– seis eran mujeres. Tres de ellos ingresaron en prisión preventiva tras pasar a disposición judicial. Esta banda, que contaba con nueve puntos de venta repartidos por Gijón, enviaba sus ganancias a Marruecos.

El año para el Grupo de Estupefacientes ya había comenzado en el mes de marzo con el desmantelamiento de una plantación de marihuana que un joven de 28 años tenía en un piso de Pumarín. En la operación fueron tres las personas detenidas, pues este individuo vendía desde su casa, en El Llano, pero disponía de esa otra vivienda, perteneciente a una mujer, que a cambio de una parte de las ganancias le permitía cultivar la sustancia. Intervinieron 140 plantas, 215 gramos de hachís y 208 gramos de marihuana.

Así fue la operación policial contra el tráfico de drogas en El Coto y Ceares

Así fue la operación policial contra el tráfico de drogas en El Coto y Ceares

Detrás de estas investigaciones hay multitud de horas de trabajo, seguimientos y diligencias varias para poder corroborar las sospechas o informaciones que llegan a la comisaría de El Natahoyo. El trabajo coordinado permite atar todas las pistas que desembocan luego en entradas y registros autorizados judicialmente. De muchas operaciones, además, se puede seguir tirando del hilo para ampliar el éxito de la actuación. También es importante la colaboración con otras unidades y hasta con cuerpos y fuerzas de seguridad distintos. Un ejemplo es la “operación Malva”, en colaboración con la UCO de la Guardia Civil y que permitió intervenir 1,36 kilos de cocaína. También la “operación Nimoy”, junto a la Guardia Civil y la UDYCO de la comisaría provincial de Pontevedra, en la que además de detener a tres personas se incautaron 2,3 kilos de cocaína y más de 1,36 millones de euros. Se trataba de una banda que se encargaba de la distribución y transporte de cocaína entre Galicia y Asturias. A toda la mercancía se suma la incautación de munición del calibre 9 milímetros “Parabellum”.

En el mes de agosto también desde el Grupo de Estupefacientes se consiguió apresar a dos individuos de origen dominicano cuando transportaban 500 gramos de cocaína. Se realizaron dos registros a domicilios y a un trastero que tenían alquilado en Oviedo, lo que permitió la localización de un laboratorio perfectamente equipado para el tratamiento de las sustancias estupefacientes. Así las cosas, hallaron trece kilos de sustancias de corte, litro y medio de acetona, una prensa hidráulica y moldes diversos además de 7,5 kilogramos de cocaína. También incautaron un vehículo de la marca Lexus y 13.160 euros proveniente del mercado ilegal.

Pero no solo de drogas se ocupa este Grupo, pues durante el verano también lograron abortar las prácticas ilegales de un gijonés que falsificaba recetas sanitarias para obtener medicamentes de forma gratuita a través del Servicio de Salud del Principado. En su casa contaba con gran cantidad de material informático, cajas de medicamentos y las recetas falsificadas que, en suma, superaban los 45.800 euros.

El final de año los llevó hasta el barrio de La Arena, donde dos varones marroquíes se dedicaban a la venta de hachís a través de un negocio hostelero. Primero, la presión policial sobre el negocio hizo que cerrasen las puertas del local, pero continuaron con su actividad ilícita en el domicilio. Y, recientemente, se completó satisfactoriamente la “operación Gorrión”, que se saldó esta semana con la detención de otros dos individuos provenientes del reino alauita y afincados en Ceares. En este caso, tal y como detallaron desde la comisaría de El Natahoyo, las denuncias vecinales advirtiendo de numerosas personas que merodeaban un local de la zona, o que aparcaban en doble fila para ir a por sus pedidos de droga, motivaron el inicio de un operativo que permitió confirmar esas sospechas. Se intervinieron 23.625 euros vinculados a su actividad ilícita además de 2,4 kilos de hachís, cocaína y sustancias de corte. Lo importante de la operación, además, fue evitar la expansión del negocio, pues tal y como corroboraron los agentes, estos hombres estaban acondicionando otros dos establecimientos en el barrio de El Llano para ampliar su mercado.

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