La recogida de sangre en Gijón coge impulso con 761 nuevos donantes en un año

Aunque con el reto aún pendiente de captar a más gente joven, la Asociación de Donantes de Sangre de Gijón empieza a recuperarse ya del trastorno del covid-19: logró pasar el año pasado de las 11.000 donaciones recogidas a nivel local y contó con el apoyo de 761 nuevos donantes. Un balance dado a conocer ayer en una concurrida asamblea general celebrada en el salón de actos del recinto ferial "Luis Adaro". Un acto protagonizado por las condecoraciones a los donantes más aventajados (los que llevan entre 40 y 100 donaciones realizadas) y para entidades locales que apoyan a la asociación. Este año, las elegidas fueron las asociaciones vecinales de Viesques y Montevil, la Fundación Real Sporting de Gijón, la Federación de Peñas Sportinguistas, la parroquia de San Antonio de Padua y la empresa Autominesa Artime. "Ser generoso hacia un ser querido quizás sea casi un instinto natural, pero serlo anónimamente y por desconocidos adquiere otra dimensión. La sangre es un elemento irremplazable", señaló Faustino Valdés, presidente de la asociación.

Los socios dieron luz verde a los balances de la directiva, que informó de un saldo positivo en 2022 –algo más de 3.000 euros– y de un presupuesto para el año en curso de 52.409 euros, una cifra también estable. Informó la junta de que en 2021 el volumen de donaciones, 10.600, ya apuntaba a la recuperación de un nivel de actividad que se había visto mermada en los meses de confinamiento, y las 11.128 donaciones del pasado consolidaron una vuelta a la normalidad que, según adelantó Valdés, va en camino de superarse. "A finales de abril nos pusimos en 3.502 bolsas donadas, y eso ya son 221 más que las del año pasado por las mismas fechas. Os felicito a todos", se congratuló.

La jornada, sin embargo, se saldó con dos objetivos pendientes. El más urgente, un plan de choque para surtir al Banco de Sangre de bolsas de cero positivo. "Es vital que la gente se acerque a donar estos días porque, tras varias urgencias recientes de alto consumo de sangre, necesitamos más reservas", explicó Ana María Ojea, directora técnica del Centro Comunitario de Sangre y Tejidos. Y el otro reto: atraer a más gente joven. En la asociación más de la mitad de los donantes tienen más de 46 años y menos de 1.800 están por debajo de los 30. "Debemos publicitarlo en redes sociales", sugirió la edil Salomé Díaz Toral, presente en la asamblea junto a Monsterrat Bango (responsable de Planificación Consejería de Salud), María Teresa Díaz (gerente del Centro Comunitario), José María Lana (presidente regional de Cruz Roja), Celia Fernández (vicepresidenta de la Junta) y el tesorero de la asociación, Crisanto Herrera.

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