Rayaba coches y luego avisaba a sus dueños: resuelto el misterio que afectó a casi una decena de vehículos en Gijón

Las víctimas describían siempre a un hombre que paseaba por la zona y les alertaba del incidente

Las cámaras de una vivienda captaron al varón "in fraganti"

Comisaría de la Policía Nacional.

Comisaría de la Policía Nacional.

S. F. L.

La Policía Nacional ya veía sospechoso que las víctimas que le iban llegando por goteo denunciando que alguien les había rayado el coche parecían siempre describir a un mismo hombre. Un varón de edad media que, casualmente, aparecía merodeando por la zona o incluso se acercaba a alertar a los denunciantes de que alguien había dañado su vehículo. La semana pasada, sin embargo, los agentes lograron la prueba que buscaban: ese hombre, un gijonés de 60 años, apareció en las cámaras de seguridad de una vivienda rayando el coche de un vecino y alertándole del incidente inmediatamente después, en actitud amistosa, fingiendo que se acababa de encontrar los daños. Ahora el varón está acusado de haber rayado adrede nueve vehículos de la zona de Porceyo.

Las denuncias, explica la Policía, comenzaron a llegar a mediados de diciembre. Según iban llegando, los agentes ya vieron "indicios" de que ese hombre de mediana edad que siempre acababa apareciendo en escena podría tratarse de la misma persona y estar relacionado con los incidentes. Los testigos de cada caso habían coincido en las características del varón y siempre decían que aparecía "merodeando" cerca de los coches dañados. En otras ocasiones, de hecho, el ahora acusado conocía a los dueños de los vehículos y era él mismo quien se encargaba de darles la noticia: alguien les había rayado el coche.

Finalmente, el sistema de videovigilancia de una vivienda de la parroquia sirvió para confirmar las sospechas. Los agentes explican: "(La cámara) grabó al detenido realizando la misma jugada: rayar el vehículo para luego ser el primero en darle la noticia al propietario, todo ello sin saber que estaba siendo grabado". Gracias a esas imágenes, los investigadores pudieron identificar y localizar al ahora acusado, que fue arrestado el pasado día 22 y puesto en libertad con cargos. Se calcula que el daño a los nueve coches está valorado en unos 9.000 euros.