El enclave de Gijón Impulsa en la Laboral encara el final tras sumar un año de obras

La complejidad técnica y administrativa de actuar en un edificio con la máxima protección justifica la demora en adecuar aulas para formación

Al fondo, espacio de la Laboral donde se ubicará el área gestionada por Gijón Impulsa. | Marcos León

Al fondo, espacio de la Laboral donde se ubicará el área gestionada por Gijón Impulsa. | Marcos León / R. Valle

La complejidad de adecuar cada actuación, por mínima que sea, a las obligaciones de cumplir con los requisitos que como Bien de Interés Cultural (BIC) se fijan sobre la Universidad Laboral justifican el retraso acumulado por el proyecto municipal de generar en el histórico edificio un enclave vinculado al vecino Parque Científico como espacio para empresas dedicadas a la formación. Un nuevo elemento de dinamización de la denominada Milla del Conocimiento: motor económico, educativo e innovador de Gijón.

El proyecto para la Laboral que puso en marcha el Ayuntamiento, a través de Gijón Impulsa, acomete su fase final tras sumar una cuarta modificación que elevó a 340 días el plazo total de la obra. Obra adjudicada en noviembre de 2022 a Elecnor por 1,2 millones (impuestos incluidos) y siete meses de plazos. El contrato se formalizó en diciembre de ese año, aunque las obras comenzaron formalmente el 27 de marzo del año pasado. Precisamente por el retraso en los permisos al ser un BIC. El plan inicial es que el trabajo pudiera recepcionarse en octubre; luego esa fecha se demoró a las Navidades.

Y ahora es marzo, aunque seguramente no el día uno como se había calculado, la fecha esperada desde el ámbito municipal para que la obra física esté finiquitada. Luego tocará ponerse manos a la obra con el equipamiento y los suministros. Otros dos o tres meses más antes de que el espacio reformado pueda estar operativo. Las tres primeras modificaciones del proyecto inicial se realizaron en julio y octubre de 2023 con una ampliación del coste en unos 115.000 euros y del plazo en 53 días. La cuarta, y previsible última modificación, se tramitó en diciembre para sumar 74 días más al operativo.

Fue en ese remate final cuando hubo que hacer frente a varias incidencias, desde acometer un cambio en la red de tuberías a contratar un ceramista que hiciera unas reproducciones de unos azulejos a reponer. Al ser un BIC cada solución técnica que se acomete debe ser negociada con la Dirección General de Cultura del Principado para contar con su aprobación.

La actuación desarrollada desde Gijón Impulsa afecta a 2.564 metros cuadrados del edificio creado por Luis Moya con la creación de un auditorio, doce aulas y diez despachos en la zona del complejo ubicada entre la cafetería y la torre, en el cuerpo sur. El entorno ha sido cedido por el Principado al Ayuntamiento de Gijón por un plazo de veinte años. La distribución de los espacios del nuevo ámbito establece seis aulas y dos despachos en la planta baja; un auditorio, cuatro aulas, dos baños, tres almacenes y un despacho en la planta segunda; un almacén y dos despachos en la planta tercera; cuatro despachos, cuatro baños y un aula en la planta cuarta y un aula y un despacho en la denominada planta torre. Doce aulas y diez despachos además de las instalaciones de servicio y accesos.

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