Hosteleros de la calle Cataluña cifran en un 80% la caída de ventas por las obras
El PSOE pide al gobierno local coordinación con los afectados y que se controle el acabado también en las actuaciones de Pablo Iglesias y la Ecomanzana
M. C.
«¿Si no hay paso peatonal, cómo va a entrar la gente a mi local?». El hostelero Alejandro Flores explicaba hoy con estas palabras a qué atribuye que haya caído su facturación «entre un 70% y un 80%», lo que atribuye a las obras que comenzaron en diciembre en la calle Cataluña y que desde principios de este mes han abierto una zanja en el tramo de calle en el que está, obligando a dar un rodeo para acceder a la puerta principal del local.
Sus quejas fueron escuchadas a primera hora de esta tarde por el portavoz municipal del PSOE, Luis Manuel Flórez, «Floro», acompañado por el edil José Ramón Tuero y otros miembros del PSOE local, que acudieron a visitar las obras de renovación del abastecimiento de agua en la calle Cataluña, tras haber visitado previamente las de la Avenida de Pablo Iglesias y las de la Ecomanzana de La Calzada.
«En todas nos estamos encontrando más o menos lo mismo», señaló Floro en referencia a las «quejas», de los vecinos los hosteleros y los comerciantes. Quejas no sólo por las molestias de las obras, sino por el acabado de las mismas en Pablo Iglesias y la Ecomanzana, como «desajustes entre baldosas a lo largo de toda la Avenida (de Pablo Iglesias), con vecinos con miedo a tropezar y caer con esos desniveles».
El portavoz municipal socialista considera que «el equipo de Morillón debería de ser más serio y preciso en cuanto al seguimiento de las obras y también su acabado. Y yo espero que esas obras no se recepcionen sin más, sino que tengan en cuenta la opinión de los vecinos y tomen decisiones que ajusten a lo que tiene que ser un vial en perfectas condiciones de seguridad y accesibilidad, no dejarlas medio acabadas», además de reclamar coordinación con los negocios afectados.
Tuero, por su parte, cuestionó que en una calle concurrida y con muchos vecinos, como es la calle Cataluña, se ralentice la obra y generen importantes ruidos por triturar los escombros que se sacan de la zanja para volver a usarlos como relleno. El PSOE también defiende que se hagan este tipo de obras por tramos para reducir la afección a vecinos, comerciantes y hosteleros.
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