De aula en aula | Un recorrido por los centros educativos de Gijón

El Fernández Vallín construye su emprendimiento: "Salimos del ambiente de los pupitres"

El instituto acondiciona un espacio para aplicar metodologías "ágiles" en clases de Formación Profesional

Por la izquierda, Andrés Fernández, Sergio Piñeiro, Enol Vázquez, Miguel Arias, José Araque, Mar Martínez, Ivonne Luiña, Francisco Botifoln, Adrián Balbín, Joaquín Rosa, Pelayo Antuña, Makar Solovei, Joel Alonso y Alejandro Fernández, en el aula de emprendimiento del IES Fernández Vallín.

Por la izquierda, Andrés Fernández, Sergio Piñeiro, Enol Vázquez, Miguel Arias, José Araque, Mar Martínez, Ivonne Luiña, Francisco Botifoln, Adrián Balbín, Joaquín Rosa, Pelayo Antuña, Makar Solovei, Joel Alonso y Alejandro Fernández, en el aula de emprendimiento del IES Fernández Vallín. / Ángel González

En el IES Fernández Vallín tenían claro su objetivo de llevar el emprendimiento al siguiente nivel. De ahí que desde la dirección del centro, y también desde el Departamento de Formación y Orientación Laboral, se comenzaran a barajar opciones para acondicionar un espacio y convertirlo en un aula de emprendimiento con todos los lujos. Tras la obra pertinente, se consiguió, aunque ni mucho menos el resultado es definitivo. Faltan mejoras, si bien el toque emprendedor se percibe entre sus paredes. "Queríamos generar un aula diferente para utilizar metodologías ágiles y que las clases no fuesen únicamente magistrales", señala Mar Martínez, coordinadora de la mencionada aula y profesora del Departamento de Formación y Orientación Laboral del Fernández Vallín.

El Fernández Vallín construye su emprendimiento

Por la izquierda, Miguel Arias, José Araque e Ivonne Luiña, en la zona de grabación. / Ángel González

Es el alumnado de los ciclos de Formación Profesional quien disfruta de las peculiaridades de la clase, que cuenta con ordenadores, mesas para trabajar por grupos, proyector, pizarra y un espacio para grabación, entre otros aspectos. Dice Mar Martínez que, puestas las bases, toca añadir detalles como impresoras, plastificadoras o incluso más ordenadores. La docente reivindica la compatibilidad del equipamiento con la tipología de las clases, enfocadas al emprendimiento empresarial. "Cuando intentamos montar un negocio hay que generar ideas y para ello se necesita un ambiente. Los estudiantes pueden estar de pie y usar la pizarra magnética para plasmar sus ideas. Es más distendido y eso les hace participar más", afirma Mar Martínez, que cree que este modelo va en consonancia con el contexto de los alumnos, formados "con las tecnologías y el mundo digital".

Raúl González, Enol Vázquez (de pie) y Miguel Loureiro, con los ordenadores del IES Fernández Vallín.

Raúl González, Enol Vázquez (de pie) y Miguel Loureiro, con los ordenadores del IES Fernández Vallín. / Ángel González

La intención es que la remozada aula no se limite a albergar clases de Emprendimiento, un módulo obligatorio y transversal en Formación Profesional, sino que el centro se plantea que acoja charlas o talleres. Aboga Mar Martínez por impulsar estas técnicas de enseñanza que huyen de las clásicas fórmulas. "Hay que apostar por metodologías que sean más dinámicas, que no se limiten a estar sentado escuchando a alguien y que te caiga la información encima", asegura. El verano pasado, el instituto gozaba del proyecto en la cabeza. Restaba materializarlo y, como el centro tenía cosas que reparar, el proceso se prolongó más de lo deseado. Hubo que montar pizarras, armarios, cables… con la inestimable ayuda del propio alumnado. Claro, a quien estudia la rama de Electricidad le vino de perlas como aprendizaje.

Mar Martínez está muy satisfecha con esta forma de dar clase en un aula adaptada a las circunstancias. "Es una manera de trabajar que permite estar más en contacto con ellos y conocerles mejor", subraya sobre los estudiantes. Se realizó un concurso, además, para seleccionar el logo que diera imagen al aula. Manuel Aller se alzó con la victoria mientras que José Araque e Ivonne Luiña compartieron el segundo escalón del podio. "Escogimos el que nos parecía más práctico para utilizarlo en documentación", resalta Martínez.

"Ha quedado muy guapa", celebra el alumno de Electricidad José Araque, para el que "cambia por completo" la sensación al dar clase en la flamante aula de emprendimiento del IES Fernández Vallín. Ivonne Luiña, que estudia Automatización y Robótica Industrial, opina que el espacio es "moderno" y brinda una mayor "motivación" para trabajar. En una línea similar se expresa Miguel Loureiro. "Es más bonito y así salimos del ambiente de los pupitres y de estar sentados todo el día", considera. A su lado, Raúl González destaca la "comodidad" del aula, que va puliendo detalles gracias a la implicación de sus propios usuarios. El IES Fernández Vallín se toma muy en serio el emprendimiento.

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