Dos noticias candentes: la huelga de transportistas por el gran aumento de sus costes de servicio, y la situación del gas natural en Europa occidental y en España. Con gran parte de los transportistas en paro aduciendo están trabajando a pérdidas y reivindicando soluciones, resulta que el gobierno de Sánchez y Podemos decide entrevistarse solo con los grandes transportistas que no secundan la huelga, y se niegan a recibir, y por tanto a negociar, con los representantes de los convocantes del paro sobre posibles salidas asumibles al conflicto planteado. Pintoresca manera de ser un gobierno de progreso y de no dejar a nadie atrás. Al final la inflación es un castigo a todos los sectores económicos, aunque crean que van a poder fijar los precios, a la chavista, por decreto.
Los de Sánchez deciden, sin contar con los refugiados saharauis en Tinduf (sudoeste de Argelia) ni con el parlamento español, reconocer que Marruecos se anexione todo el Sáhara occidental ex español, a cambio de una autonomía cuya concreción desconocemos, precisamente en plena crisis del gas natural, cuyo principal suministrador era Argelia. ¿A cambio de que no asalten durante dos años las vallas de Ceuta y Melilla? Aquí en Gijón seguimos esperando la situación de la regasificadora del Musel. ¿Ya es rentable para tratar el gas licuado que ahora importamos crecientemente a EE UU? ¿Uno o dos de los depósitos pueden servir a corto o medio plazo para distribuir o tratar hidrógeno? También dicen que España dispone de reservas de gas natural para 40 años, pero en la Ley del Clima el gobierno de izquierdas ha prohibido su extracción.
Una buena noticia relativa al aparcamiento en la antigua parcela de Peritos, detrás del IES Jovellanos: las actuales plazas doblarán su número mediante otra planta de aparcamiento subterráneo. Este situado en la avenida de Manuel Llaneza sí tendrá un carácter más disuasorio al estar más céntrico, en relación con la actual estación de autobuses o la futura parada de Metro de la plaza de Europa. Tal debe ser el objetivo de la planificación urbana, no ir contra este colectivo o el otro porque no nos cae bien, contra los conductores o contra el Grupo Covadonga, sino organizar los espacios en beneficio del conjunto de la ciudadanía. Ahora falta rectificar con el riachuelo Piles, que se adecente, se evite la contaminación, y permita la práctica habitual del piragüismo.
