Los trabajos en el Centro Cultural de Grado se reanudarán en marzo, prevé el Ayuntamiento

El proyecto del futuro Centro Cultural de Grado afronta actualmente un modificado a petición de la dirección de la obra y el gobierno municipal espera que este asunto pueda ser llevado al Pleno de marzo, previsiblemente a inicios de mes, para que a continuación puedan reanudarse los trabajos de construcción del equipamiento, localizado en el casco urbano de la villa y cuya conclusión se espera para este verano, según ratifica el Ayuntamiento.

El nuevo Centro Cultural de Grado es una infraestructura muy esperada en tanto que llegará para ofrecer más opciones culturales y de ocio a un concejo que se destaca por su programación en estos ámbitos, pero que echa de menos un espacio para actos con gran afluencia de público, representaciones teatrales, conciertos o incluso proyecciones de cine.

La obra ha sido posible gracias a la donación de la familia González Miranda del local en el centro de la villa que lo acogerá, un edificio con varias plantas y con capacidad para poder albergar un Teatro Auditorio. Con la obra parada a falta de que se apruebe el modificado de obra, el Ayuntamiento espera que sea posible retomar los trabajos ya en breve plazo. "La previsión es que en los primeros días de marzo se continúe con la ejecución de los trabajos", explica el gobierno local.

El proyecto se está impulsando a través de un convenio entre el Principado de Asturias y el Ayuntamiento de Grado. El diseño que tendrá el equipamiento, que se exhibe en la Casa de Cultura moscona, se inspira en la estética de los cines y teatros de los años sesenta del pasado siglo XX y es obra del arquitecto Jeremías Sampedro.

El proyecto para convertir el edificio –que antaño acogió los Almacenes Miranda– en las nuevas instalaciones culturales que tendrá Grado prevé un auditorio en el que habrá espacios de formas curvas en las barandillas y butacas y en la zona alta, con unas bóvedas en forma de concha superpuestas como refuerzo al sonido en directo en la zona de más atrás del patio de butacas, que tendrá 250 plazas.

Teatro, cine y música

Para concebir el proyecto se ha tenido en cuenta que el futuro Centro Cultural podrá tener usos como el de ofrecer teatro, conciertos o sesiones de cine. Así, según explicaron los responsables del proyecto en su momento, hay una "concha acústica movible" que favorece la calidad de las sesiones musicales y se puede retirar cuando por ejemplo la caja escénica cuente con actividades de teatro.

La zona del auditorio tendrá patio de butacas o platea en la planta baja y plazas para personas de movilidad reducida. Desde la parte trasera del edificio se accederá a un montacargas para materiales escénicos. En la planta superior habrá una sala polivalente de 91 metros cuadrados, justo encima del auditorio. El edificio tendrá en su parte superior una terraza que podrá acoger eventos al aire libre.