Llegan las vacaciones de verano: mejores planes para los niños

Llegan las vacaciones de verano y toca planear lo que se va a hacer con los niños. España es el segundo país de Occidente con el parón escolar estival más largo –diez semanas–, un tiempo que supera al de muchos países europeos y en línea con los países del Norte de África. En la orilla norte del Mediterráneo, solo un país como Grecia tiene una semana más que España. Sin embargo, otros como Italia y Francia tienen una y dos menos, respectivamente. Por su parte, otros como Reino Unido y Alemania sí que optan por acortarlas a seis semanas y repartir otras a lo largo del curso.

Comparaciones aparte, lo que es una realidad es que muchos padres y madres necesitarán ayuda para conciliar durante estos dos meses y medio, o parte de este tiempo, y no está de mas conocer cuales son las opciones más recomendadas por lo expertos para entretener a los niños sin necesidad de que pasen largas horas viendo la televisión o con tabletas y ordenadores.

Opciones tanto infantiles como para toda la familia que ayudarán a los más pequeños a mantener cierto ritmo y no perder la actividad desarrollada durante todo el curso en sus centros educativos.

Mejores planes de verano para niños y niñas

En estos meses de verano y calor, una excelente opción para los más jóvenes de la casa son los campamentos de verano, las salidas de fin de semana en familia o las excursiones al bosque o a la montaña, por no hablar de las jornadas en la playa.

–Campamentos de verano. Se trata de una de las actividades más completas y que más gustan a los niños. Es toda una aventura salir con otros amigos a conocer a gente nueva mientras se está acampado en un sitio desconocido y explorando día tras día. Hay muchos tipos de campamentos, desde los que organizan asociaciones de ocio hasta los organizados con la familia, por no hablar de los municipales, que permiten la conciliación pues los niños acuden a estos durante unas horas cada día mientras sus padres trabajan o se dedican a otros menesteres.

Si entre vuestros planes de verano estar el ir unos días de camping con la familia, se recomienda ir a un camping alejado de la ciudad, pues así los más pequeños pueden aventurarse a explorar sitios nuevos. Además, se trata de una actividad que ocupa cierto tiempo, especialmente la preparación previa a los campamentos: preparar la tienda, la comida, la mochila… y eso mantiene a todos entretenidos y ocupados durante unos cuantos días.

–Actividades en casa. Una de las actividades más divertida para realizar sin salir de casa es la cocina, pues suele gustar mucho a los niños y les mantiene entretenidos durante horas. Pueden prepararse desde recetas más simples como algún dulce sencillo o preparar una merienda, hasta convertirse en auténticos masterchefs preparando platos más elaborados para disfrutar con toda la familia.

Sin duda, se trata de una experiencia muy enriquecedora y agradable para todos; la preparación de los ingredientes y los utensilios, además de la elaboración de la receta nos ayudarán a mantener a los peques activos y curiosos. Asimismo, nos brindan una magnífica oportunidad para enseñar cantidades, números y medidas al utilizar la balanza.

–Actividades acuáticas. Jugar en el agua, especialmente en verano y con altas temperaturas, se puede convertir en el plan ideal para todos. Desde pasar el día en la playa haciendo castillos de arena, jugando a las palas o refrescarse con chapuzones en el mar, hasta hacer windsurf o buceo para los más aventureros. Además, como plan perfecto para pasar todo el día en familia también se puede disfrutar de los parques acuáticos o parques de atracciones de agua.

Si, por otro lado, se prefiere un plan más tranquilo, siempre hay la opción de ir a la piscina y jugar a cartas o a juegos de mesa en familia o traer a unos amigos a pasar una tarde tranquila disfrutando del sol y del agua.

Además de realizar diferentes actividades, es importante mantener durante estas vacaciones de verano los buenos hábitos en lo que a horarios y buena alimentación se refiere. Asimismo, en algunos casos tampoco está de más establecer unas rutinas para poder realizar los deberes de verano, pero que estos no sean una obligación y se haga pesado para ellos, sino que forme parte de su día a día.