Entrevista | José Mon Secretario de la Asociación de Vecinos San Miguel de Villardeveyo de Llanera

José Mon: "Villardeveyo tiene posibilidades de crecer con solares más baratos, pero necesitamos disponer de más suelo"

"Esperamos que se reforme el edificio de la estación de Villabona, está en ruinas"

Pepe Mon junto la estación de tren de Villabona.

Pepe Mon junto la estación de tren de Villabona. / Sara Arias

José Mon González es el secretario de la Asociación de Vecinos San Miguel de Villardeveyo, en Llanera, donde el colectivo trabaja por mejorar la vida de sus habitantes como canal de comunicación con las administraciones públicas y como acicate de la vida cultural y social de la zona. Además, la entidad tiene varias iniciativas y demandas en marcha, como la construcción de un túnel subterráneo en el acceso al andén de la línea de Gijón en la estación de tren de Villabona. "El proyecto está redactado y ya salió a licitación, esperamos que se haga realidad", alerta.

-¿Hay problemas en el consultorio médico de La Rotella?

-Pasa algunas semanas que durante dos o tres días no hay médico. Es un problema de los consultorios periféricos en toda Asturias desde la pandemia. Pasa que, cuando hay una baja o vacaciones, queda sin cubrir y también que si, por ejemplo, falta el médico en Arlós, lo mandan para allá y, entonces, hace falta aquí. En la parroquia somos sobre novecientas cartillas, muchas como para que quede sin atender.

-¿Cuándo saldrá adelante la reforma de la estación de tren de Villabona para mejorar la accesibilidad que demandan?

-Estamos esperando por ello, llevamos una pelea con Adif y Renfe desde hace tiempo y ya nos parece un poco imposible, aunque el proyecto está redactado y ya salió a licitación. Esperamos que se haga realidad. El problema se da en la línea de Gijón, que es bastante estrecha y hay problemas de acceso porque la gente tiene que cruzar por las vías y es un peligro. La idea del proyecto es hacer un túnel subterráneo por debajo de las vías, con unas pasarelas para acceder a los andenes.

-También han reclamado acondicionar el edificio de la estación. ¿En qué punto se encuentra esta cuestión?

-La estación es histórica y una réplica de la Crownstreet de Liverpool. En su día, el Ayuntamiento se comprometió a que si Adif no lo hacía, lo plantearían ellos, pero hay varios problemas. El edificio está ubicado entre las vías, por lo que es terreno de Adif y entonces el Ayuntamiento de mala manera puede actuar ahí porque no tiene la titularidad. Esperemos que se reforme el edificio porque está en ruinas.

-Han solicitado la reforma de las casas del ferrocarril. ¿Qué usos plantean?

-Están muy deterioradas y habría que arreglarlas también para darles un uso. Algunas están ocupadas aún por familias de ferroviarios, pero son ya pocas y tenemos un problema ahí de que se mete gente, ocupando, y que haya malos rollos en la convivencia entre los vecinos de verdad y los que llegan. Hubo varias propuestas para las casas y, también, para la estación, como hacer pisos para alquilar, por ejemplo, a estudiantes o erasmus. Oviedo está a diez minutos en tren y Gijón a poco más. También nos gustaría que se pudiera dedicar una parte al tema cultural, un uso en beneficio de la gente de la zona. Las casas hay que habitarlas. Son viviendas muy grandes, pero están abandonadas.

-Han recibido a muchos nuevos vecinos tras la pandemia y se dice que no hay casas libres ni de alquiler ni de venta en toda la parroquia...

-Sí, los chavales que vinieron están encantados. Se encuentran muy bien porque es un sitio tranquilo para vivir y con muy buenas comunicaciones. Si consiguiéramos que se modifique el plan urbanístico para que se edificara, creo que se asentaría mucha más población. En Pruvia, Ables y San Cucao están edificando mucho, pero aquí ya está colmatado. Sin embargo, la parroquia tiene posibilidades de crecer con solares más baratos que en otros lados, en una ubicación estratégica, y eso hay que aprovecharlo. Para ello necesitamos disponer de más suelo. Esa modificación del plan se tiene que poner en marcha. Llanera está creciendo mucho y aquí tenemos zonas para edificar, hay terrenos e, incluso, hubo ya gestiones para edificar tres o cuatro proyectos. No se llegó a hacer.

-¿Qué más necesidades hay en Villardeveyo?

-Hace falta regenerar un poco Villabona, está muy abandonado. Antes aquí había mucha vida, con 1.900 vecinos, y ahora seremos 700. Había bares y tiendas, porque se vivía del ferrocarril y de la mina, que sigue ahí, pero es otro tipo de empresa y otro tipo de explotación, con maquinaria a gran escala y trabajadores que son ajenos al pueblo, gente de fuera que viene a trabajar. También sería necesario, y estamos en esa pelea, que se instalen arneses para los contenedores, para que no anden rodando por calles y caminos. Hace falta también renovarlos porque rompen y se quedan ahí hasta que el camión ya no puede recogerlos.