El futuro de la comarca Oscos Eo pasa por potenciar el turismo rural, dentro de una estrategia global, de unión, en el que la ciudadanía asuma protagonismo y se involucre en el proyecto. Es el planteamiento en el que se centró ayer la Feria de Muestras de Vegadeo, donde, a modo de ejemplo, se utilizó la experiencia de Taramundi, un municipio en el que desde hace treinta años todos sus vecinos, desde los artesanos hasta los ganaderos, hacen las funciones de promotores turísticos, tratando de agradar al visitante. El certamen veigueño cerró las puertas de su quincuagésima tercera edición con buenas sensaciones, y, a falta de los datos totales, con mejores cifras de visitantes que en años pasados.

"Un Ayuntamiento, por sí solo, no tiene la fuerza suficiente. Ahora se están colocando piedras en la comarca Oscos-Eo para potenciar el turismo, donde se ve la importancia de ir todos de la mano", expresó en la mesa redonda sobre el tema el alcalde de Vegadeo, César Álvarez, que hizo un llamamiento para lograr "la involucración de los vecinos" en esta tarea. Para aportar experiencias en la materia, hasta el ferial veigueño se desplazaron, como invitados, representantes de Taramundi, donde hace tres décadas nació el turismo rural, y Santillana del Mar, municipio que con cinco mil habitantes recibe anualmente 1,2 millones de turistas.

"En estos momentos, estamos trabajando en un proyecto de ciudad turística inteligente para mejorar la accesibilidad en nuestras calles y dotar a la villa de fibra óptica", señaló Mari Luz Muñoz, teniente de alcalde del municipio cántabro. Muñoz, que destacó la riqueza cultural de su tierra, aconsejó a los dirigentes de Oscos-Eo "que sean constantes, y que se cuide mucho el medio ambiente y la estructura de la villa y el municipio, tal cual es".

Taramundi es, por su experiencia y trayectoria, una voz acreditada para hablar de turismo rural. Allí, este sector ha logrado una revolución, "creando y consolidando muchos puestos de trabajo en la artesanía y en la hostelería, frenando el éxodo y apostando por la calidad", tal y como expresó su alcalde, César Villabrille. Para Jesús Mier, presidente de "Turismo Taramundi", ha sido "una herramienta bestial" para el desarrollo de la zona. "Todos hemos asumido un rol, un objetivo común, el de agradar a los turistas", subrayó, haciendo del municipio "la cuna del turismo rural, algo de lo que estar orgullosos".

La feria acogió, además, una mesa redonda sobre Vegadeo en el Camino de Santiago, donde se puso de manifiesto la importancia de construir un albergue en el municipio para recuperar el paso original por este itinerario. También se presentó la obra "Aldeas sen voz" de Vicente Ansola, y se vivió una demostración de doma. Todo ello acompañado de una temperatura agradable, lo que animó a la participación de vecinos y visitantes.

No en vano, horas antes del cierre definitivo de las puertas de la 53ª edición de la Feria de Muestras, el balance realizado desde el equipo de gobierno local fue "muy positivo". "La intención era darle un giro a la feria, y se ha conseguido. Estoy muy contento; los números señalan que se mejoró la afluencia con respecto al año pasado", aseguró el Alcalde. Sólo el sábado hubo 1.500 entradas más que durante el mismo día del pasado año. "Estamos muy orgullosos, es un evento muy enraizado, e iremos mejorando año a año", remató.