La gerencia del área sanitaria I, con cabecera en el Hospital de Jarrio, busca cubrir la vacante en el servicio de cardiología, donde un solo profesional atiende a toda la población del Noroccidente, unas 45.000 personas. La oferta, publicada en el "Boletín Oficial del Principado de Asturias" (BOPA), indica la "necesidad" de cubrir la plaza libre en la plantilla orgánica del centro, un proceso que se realizará "mediante nombramiento de interinidad".

El servicio de cardiología sufre en Jarrio "un problema histórico", tal y como reconocía en octubre del pasado año la gerencia del área. En aquel mes, y durante tres días, el Hospital no contó con cardiólogo, después de la jubilación de uno de los profesionales y la marcha del otro que se encontraba en activo. La dirección médica logró entonces cubrir una de las dos plazas, mientras que la otra lleva vacante varios meses, a pesar de los intentos por atraer a un profesional que preste servicio a los usuarios del centro.

Con vistas a esta nueva convocatoria, se exige a los candidatos que dispongan del correspondiente título en Medicina y Cirugía, con la especialidad en Cardiología, no ostentar la condición de personal estatutario fijo en la categoría y especialidad, y presentar su solicitud en un plazo de veinte días naturales a partir de la fecha de hoy. Una comisión valorará las diferentes candidaturas y seleccionará al profesional.

La del cardiólogo se suma, de esta manera, a otras plazas que se han ido cubriendo mediante un proceso similar, como ha sucedido recientemente con una vacante en ginecología, adjudicada el pasado 5 de enero. No obstante, otra de las convocatorias, esta vez en la especialidad de nefrología, tuvo que ser declarada desierta, al no haberse presentado ninguna solicitud que cumpliese con los requisitos de participación establecidos para la cobertura de la plaza vacante.

En los últimos meses, son muchas las voces que se han alzado para denunciar la carencia de personal que sufre el centro, sobre todo en servicios de especial relevancia, como cardiología, urología, anatomía patológica y neurología. Según denunció a finales de diciembre la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública, la lista de espera en cardiología es de un año y medio, y en neurología alcanzaría los seis meses. Varios partidos políticos (Partido Popular, Podemos, Foro Asturias) han presentado propuestas a través de sus grupos regionales para que se refuerce el servicio en el Noroccidente.