Los vecinos de la capital de Santa Eulalia de Oscos usuarios de la compañía Movistar llevan desde el 13 de diciembre prácticamente incomunicados, con continuos fallos en las líneas móviles y fijas, y también en el servicio de Internet. La situación afecta sobremanera a los empresarios locales, que denuncian pérdidas de reservas y encargos durante la Navidad.
La compañía Telefónica explica que el problema se debe a la ruptura, a causa de uno de los temporales de diciembre, de los anclajes de la parábola de la estación base de Santa Eulalia. Las piezas necesarias para su reparación definitiva están pedidas desde el mismo momento en que se registró la incidencia, pero siguen sin llegar. Fuentes de la empresa explican que, al romperse los anclajes, la parábola deja de estar bien orientada hacia el repetidor y, por eso, se pierde la señal de manera intermitente.
La empresa explica que cada vez que hay viento o cualquier vibración la parábola se vuelve a mover, lo que obliga a los técnicos a subir y reorientarla de nuevo. De manera temporal se han colocado anclajes provisionales, pero no son tan resistentes como los encargados.
El alcalde de Santa Eulalia, Víctor Lorido, ha perdido la cuenta de las veces que ha llamado a la empresa para urgir una solución y constata los problemas que esta situación provoca en el vecindario.
"Esto supone un trastorno económico importante", denuncia el presidente de la asociación de turismo rural Oscos-Eo, Pedro Martínez, que incide en que muchas veces los teléfonos no funcionan, pero sí dan señal, lo que confunde a los clientes. El panadero Valentín Gayoso también se ha cansado de reclamar una solución que no llega y lamenta la pérdida de pedidos durante la Navidad. "Ahora que tanto se habla de la España vaciada y mira qué servicio nos dan. Entiendes un problema de uno o dos días por un temporal, pero más de quince días sin solución...".
