El vino Penderuyos 2019, de la bodega Antón Chicote de la Denominación de Origen Protegida vino de Cangas es uno de los ocho mejores vinos de la primera edición del concurso de vinos de influencia atlántica "Atlantic" que se celebró en los últimos días en Cangas del Narcea. El tinto joven de Antón Chicote fue elegido el mejor dentro de su categoría en la cata a ciegas en la que participó un jurado compuesto por 17 sumilleres de toda España y expertos gastronómicos.

"Fue una sorpresa muy grande y un orgullo", reconoce Antón Chicote. El viticultor y bodeguero de 73 años asegura que el premio es de todos los vinos de Cangas y destaca de Penderuyos que se identifica con la tradición vitivinícola de la zona, al realizarse de la manera tradicional con la mezcla de las variedades tintas autóctonas.

En la categoría de tinto maduro, en la que otra bodega canguesa Monasterio de Corias se quedó a las puertas del oro con su Valdemonje albarín negro 2015, fue elegido como el mejor el Komokabras rojo K-ño 2018, de la bodega Adega Entreosrios; en envejecidos, fue Tebaida 2015, de bodega Casar de Burbia; y en generosos se eligió a Amontillado olvidado, de bodegas Sánchez Romate. En los blancos, el mejor joven fue Terras de Compostela 2019, en los maduros recayó en Renacido 2017, de Pablo Vidal Vinos con Personalidad; y en envejecidos se fue para Ama de Gorka Izaguirre 2015, mientras que el mejor rosado fue Ostatu rose 2019. Además, la DOP canguesa destaca que siete vinos de las cinco bodegas canguesas que se presentaron al concurso llegaron a la final.