El centro de empresas de Valdés, ubicado en el polígono industrial Barcia-Almuña, inició ayer una etapa ilusionante con la entrega de las llaves a sus nuevos inquilinos. Se han asentado en el vivero siete firmas que suman un total de 14 puestos de trabajo. Las compañías han alquilado cuatro naves y tres oficinas por un máximo de cuatro años y a un precio más competitivo que el que puede encontrarse en el mercado: 110 euros las primeras y 80 euros las segundas.
La encargada de la sede de la Cámara de Comercio en Luarca, Silvia Pérez, agradeció a los empresarios su valentía en un momento de crisis. Todos buscan en estos espacios “un lugar donde crecer” y “una posición estratégica” para dirigirse a potenciales clientes del Occidente asturiano y de la Mariña lucense.
El edificio, cercano a la Autovía del Cantábrico, estaba inutilizado desde 2005 y ahora es un vivero de empresas que aspira convertirse, además, en un primer espacio de ‘coworking’ del Noroccidente. Todo ello es posible gracias a un acuerdo con el Ayuntamiento, que es el titular de las instalaciones, y la Cámara de Comercio de Oviedo, encargada desde año de su gestión.
El alcalde, Óscar Pérez, dio ayer, en el acto de entrega de llaves, la bienvenida a este “despegue” del centro, mientras el presidente en funciones de la Cámara de Oviedo, José Manuel Ferreira, destacó la importancia de “mantener la ilusión empresarial” en estos momentos de crisis actuales y en zonas “tan castigadas” de Asturias.
Ferreira defendió además la colaboración público-privada para poder ayudar a la sociedad y crear riqueza. “Este es un ejemplo de ello”, explicó durante el acto.
Por su parte, los empresarios mostraron su agradecimiento por el hecho de que se haya puesto a su alcance la oportunidad de disfrutar de las instalaciones del centro de empresas del polígono Barcia-Almuña a precios competitivos.
Entre los quienes se han asentado en el centro se encuentra la empresaria valdesana Silvia Suárez, que ha alquilado un despacho para poder separar vida familiar y laboral. “Hasta ahora trabajaba en casa con dos niños pequeños y es muy difícil; tienes que emplear el doble de tiempo para sacar adelante los proyectos”, destacó.
“Una oportunidad”
También se ha instalado Jonathan Arango, propietario de una firma de sistemas de estibación, que pretende abrir en la nave alquilada una tienda para ofrecer los productos y máquinas que diseña y fabrica en otro espacio del mismo polígono. “Se necesitaba crecer y esta es una oportunidad”, detalló.
Francisco González es otro de los afortunados. Dirige una empresa dedicada a la construcción de casas con ruedas y servicios de soldadura única en España. En el centro también pasan a tener ubicación las empresas José Ramón Pérez Instalaciones Eléctricas, Asturcafé Expendedores, el estudio de comunicación “Lapila”, y la empresa de diseño gráfico e impresión “Silvia Cerceira”.
Compañías y autónomos que lograron los espacios tuvieron que enviar una solicitud a la Cámara de Comercio, que estudió las ofertas y adjudicó en función de la puntuación de los candidatos de acuerdo a diversos parámetros. Las naves fueron las más demandadas, tanto que se quedaron fuera 4 empresas. En el caso de los despachos solo uno ha quedado disponible.