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“La obra ha sido un regalo”, celebra el cura acerca de la reforma de la colegiata de Salas

Alejandro Sanzo destaca que el templo es “buque insignia de la villa e imagen del pueblo” al reflejar si este es “dejado o conserva su patrimonio”

Autoridades, patronos de las obras, miembros de la Universidad de Oviedo y de la Fundación Valdés-Salas, y encargados de los trabajos, ante el templo. | D. Á.

La Colegiata de Santa María la Mayor de Salas abrió ayer a mediodía sus puertas para presumir de nueva imagen. Aunque no es necesario entrar en su interior para apreciar el efecto de las obras realizadas desde enero en el templo, puesto que ya en la fachada se percibe la mejora del edificio. “Estaba dejada, en fase de ruina y gracias a la Fundación Valdés–Salas y a quienes aportaron el dinero se pudo hacer esta obra que es un regalo”, aseguró el párroco de Salas, Alejandro Sanzo.

Un regalo para él, porque sintió el alivio de no tener que hacerse cargo de una obra cuya inversión fue de 150.000 euros y que reconoce que para la parroquia sería inasumible, pero también para el pueblo “porque la colegiata es uno de los buques insignia de la villa y es la imagen del pueblo, la que nos dice cómo es ese pueblo, si es dejado o si conserva su patrimonio”, recalcó el cura.

El sacerdote formó parte de la comitiva que visitó este miércoles la iglesia durante la presentación de la obra, junto con los representantes de los copatrocinadores del proyecto la Fundación Cajastur-Liberbank, la entidad Comen Menéndez-Castañedo XXI y del arzobispado, así como miembros de la Universidad de Oviedo, los arquitectos y personal de la empresa implicados, el alcalde de Salas, Sergio Hidalgo, la edil Ana Pérez, e integrantes de la Fundación Valdés Salas, impulsora de la restauración, encabezados por su presidente Joaquín Lorences, que fue el encargado de guiar la visita.

“El objetivo fundamental era quitarle la humedad al edificio, que estaba perjudicando su viabilidad a largo plazo y la de su contenido, afectando al mausoleo de Fernando de Valdés-Salas y a los retablos”, explicó el presidente de la Fundación. Un propósito conseguido, dado que los primeros resultados ya se están notando al lograr bajar la humedad dentro del edificio del 90% hasta en torno el 60 y 65%. “Conseguir bajarla 30 puntos en un edificio tan antiguo con paredes tan anchas, es una prueba de que el trabajo de impermeabilización y saneamiento realizado por la empresa está dando sus frutos, pero todavía tiene que salir más humedad y se ve como en algunos puntos del edificio está expulsando el agua que acumuló durante décadas y que lo estaban perjudicando”, añadió.

Joaquín Lorences, el segundo por la derecha, explica la obra a los asistentes ante el altar mayor y el mausoleo de Fernando de Valdés-Salas. | D. Á.

Las obras consistieron en cambiar la cubierta del edificio, impermeabilizar los muros rejuntando todos los sillares y sellando las grietas, además de realizar un sistema de drenaje en el exterior de la colegiata. En el interior, se limpiaron y pintaron las paredes y se lució el suelo. “La constructora lo hizo todo con mucho cariño, son de aquí e invirtieron tiempo para hacerlo con mimo y que quedase perfecto”, destaca el arquitecto de la obra Luis Fuentelsaz. Por su parte, Pablo Iturralde, encargado de la constructora Forestal La Salense, señaló que fueron “muy respetuosos con el edificio, teniendo en cuenta los sistemas constructivos de la época y no utilizando técnicas muy modernas ni invasivas”.

El trabajo de recuperación de la colegiata no termina aquí y la Fundación Valdés-Salas ya ha anunciado que el siguiente paso será restaurar el mausoleo de Fernando de Valdés-Salas, fundador de la Universidad Oviedo, situado en el interior del templo y que data del XVI, siendo una obra del escultor italiano renacentista Pompeo Leoni, que llegó a España llamado por Felipe II para trabajar en El Escorial.

“Es una joya del Renacimiento no solo de Asturias o España, sino de Europa”, destacó Lorences. Por ello, la Fundación quiere sacarlo del olvido y devolverle su esplendor, marchitado actualmente también por la humedad, con una intervención que primero comenzará con un estudio de diagnóstico de la situación en la que se encuentra, para crear un plan de restauración adecuado a sus necesidades.

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