Ibias pide ayuda a sus vecinos para asentar a una familia con niños en la parroquia de Tormaleo

El Ayuntamiento espera salvar así la continuidad del colegio San Jorge, que solo tenía dos estudiantes

D. Álvarez

El Ayuntamiento de Ibias pide colaboración a los vecinos de las parroquias de Tormaleo, Taladrid y El Bao y Sisterna para facilitar el asentamiento en la zona de una familia de exiliados de Venezuela. El interés del Ayuntamiento por intentar mantener viva la zona alta del concejo, donde se mantiene abierto un colegio - el San Jorge de Luiña-, que en la actualidad volvía a tener solo dos estudiantes, les hizo anunciar hace unos meses la búsqueda de familias con niños. A raíz de este anuncio recibieron la llamada de la familia, que estaba instalada en una habitación en Oviedo.

“Hablamos con los vecinos para conseguir que les alquilasen una casa y lo conseguimos en el poblado de Villares, pero ellos ahora mismo no pueden optar a un trabajo y no pueden pagar el alquiler, así que la empresa de transporte escolar nos va a ayudar a pagarlo hasta verano y para el resto del año pedimos la colaboración de los vecinos”, explica la teniente de alcalde Isabel Villar.

El viernes se reunieron con los presidentes de las juntas vecinales, pero no obtuvieron la respuesta esperada, así que habilitarán una cuenta bancaria para que quien quiera aporte el dinero de forma voluntaria. “Esperamos que puedan tener su situación regular lo antes posible, pero puede llevar hasta 10 meses, así que tenemos que ayudarles para que se puedan asentar aquí, no es solo por el colegio, es que después de perder ese servicio también peligraría el mantenimiento del consultorio o del botiquín de farmacia”, expone.

La familia ya lleva una semana instalada en el colegio y está compuesta por cuatro menores de 11, 9, 7 y 3 años.