Ya saben, la comisión de industria del Congreso aprobó el pasado martes una iniciativa de PSOE, ERC, Podemos, Democracia y Libertad y PNV que insta al Gobierno a que prohíba el uso de la fractura hidráulica, el llamado "fracking".
O no se quieren enterarse de nada o están al servicio de determinadas multinacionales -las que explotan pozos de petróleo y gas con procedimientos convencionales- o, sencillamente, militan contra de los intereses de España lo cual en el caso de los separatistas está más que visto y en el resto, en la izquierda radical zapaterista y podemita, hay más que indicios.
España podría llegar a ser exportadora neta de gas natural en menos de veinte años con la nueva tecnología. Es lo que ya ocurre en EE UU y hasta tal punto están teniendo éxito que el poderosísimo cartel de la OPEP ha hundido los precios para ahogar la competencia, por cierto con escaso éxito.
En menos de veinte años seríamos auto suficientes con el "fracking". El saldo exterior de nuestra economía se vería muy beneficiado. Y podríamos cubrir la demanda nacional durante casi un siglo a tenor de la reservas estimadas.
Todo a favor y de forma superlativa y sin ningún problema ya que los yanquis no son tontos y están volcados es esos nuevos procedimientos de extracción de gas y petróleo.
La conclusión es la ya apuntada al principio de este comentario. Caben tres posibilidades: o los grupos social nacionalistas no se enteran de nada o están al servicio de oscuros intereses o sencillamente odian a España. O las tres cosas.
