Agujeros negros

Como saben ustedes, recientemente la comunidad científica internacional se regocijaba porque se había conseguido "fotografiar" un agujero negro. Decían los periódicos, que cuando informan de ciencia son la bomba, que para visualizarlo había que construir un telescopio del tamaño de la tierra, un fotomatón gigante, para el cual no habría sitio físico. Por eso algunos, practicantes de la teoría de la conspiración, dicen que estamos buscando otros planetas. Imagínense que el Principado de Asturias enviase una misión comercial a uno de esos exo-planetas que han encontrado mis compañeros de la Escuela de Minas de Oviedo y que se cree pudiesen albergar vida. Seguro que enviarían algún técnico de Hunosa (esa empresa "multi-task" que sirve para todo) próximo a la prejubilación (por si acaso), acompañado de los sindicatos mineros, algún representante de Fucomi, otro de Sodeco..., para ver si la empresa puede pivotar y encontrar nuevas áreas de negocio, y quizá reciclar la basura espacial, que los astronautas han dejado orbitando alrededor de este asqueroso planeta llamado tierra. Seguro que llevarían unos centollos para obsequiar a los marcianos y les entregarían uno de esos panfletos que se imprimen en papel reciclado y que no sirven para nada, que explican un plan estratégico que nunca se cumple, y cómo se invertirán los fondos mineros del siglo XXX, pues a esta velocidad el problema de las Cuencas seguirá sin resolver y arrastrará a la región, y si me apuran no se resolverá nunca, porque el "reality-show" político-síndico-empresarial no estará de moda, pues en realidad de lo que se trata, es liberalizar y desarrollar la economía, protegiendo al trabajador con formación de calidad, haga lo que haga. De hecho, creo que no existirán los consejeros de industria ni los organismos de promoción, porque en un sistema trasparente donde cada cual conoce sus derechos y deberes, estas figuras impiden más que facilitan. Además en un mundo conectado, solo será necesario hacer un clic y todo estará lanzado. Obviamente habrá que respetar las reglas, que serán claras, diáfanas, parsimónicas, todo lo contrario de lo que ocurre ahora, que protegen a "lobbies" y "lobos".

Decía que, en lugar de construir ese macro-telescopio irrealizable, se sincronizaron los principales radiotelescopios del planeta: el telescopio del horizonte de sucesos. En realidad, lo que se mostró no es una foto, sino una reconstrucción tomográfica de su posible forma iluminándolo desde diferentes puntos. Un agujero negro no se puede fotografiar porque es un sumidero de energía, una gran singularidad que absorbe todo lo que le rodea, con lo cual no pasan señales que puedan informar de su presencia. Es decir, los agujeros negros están en el espacio nulo de la técnica de detección. Además hay un problema de talla. Es como detectar el cáncer en estadillos precoces o reconstruir la figura de un fantasma. Hablo de un "ghost", no de los políticos que venden la moto del "make-it-happen". Y dado que existe la optimización, el agujero negro se consiguió "fotografiar" con menos medios. Un día oí a un científico decir que si nuestro fémur no se hubiese sido optimizado mediante la evolución, tendríamos la osamenta de un mamut para que realizase las mismas funciones, como el estado de las autonomías, redundante.

Eso de detectar "black-holes", aunque no suena bien, puede ser útil. En toda organización hay agujeros negros, verdaderos sumideros donde la creatividad se destruye, en un vórtice infinito girando según la ley de Coriolis: los rotacionales destructivos. He visto unos cuantos ejemplos en la Universidad de Oviedo, y ningún rector ha sido capaz de atajarlos, aceptando su presencia en una connivencia un tanto sospechosa. Y llega un momento que tanto desecho se acumula, que no son capaces de tragarla, y empiezan a brotar el malestar a borbotones, los casos de abuso de poder, las ilegalidades y las "alegalidades". Un ejemplo es el colapso existente en la evaluación de los grupos de investigación del Principado de Asturias, más de un año y medio dando la callada por respuesta. La última vez que se presentó la financiación de grupos competitivos "armóse la de mi madre", como diría un minero. No hay dinero para todos, y lo mejor es hacer convocatorias a medida e ignorar al resto. Da la impresión que el pescado está vendido antes de salir a faenar: ese es el algoritmo. Y da gana de cruzarse de brazos, de incumplir el contrato de Personal Docente e Investigador (PDI), y como otros tantos dedicarse sólo a la docencia (PD), enviando la I al "black-hole". Pero, la genética es muy traidora, y el que nace "pa" martillo? Algunos hemos nacido para divergir convergiendo, para innovar, para crear, para mejorar, para ver las cosas crecer, para aprender y volver otra vez a divergir en un círculo infinito, y no nos interesa esta burocracia inútil que nos ahoga. La verdadera enjundia es resistir, no vencerse nunca, aún sabiendo que el cáncer es metastásico, que el sistema inmune está vendido, que hagas lo que hagas siempre encuentras ramificaciones de la mediocridad. Lo peor es que lo sufragamos con nuestros impuestos. Hacen falta muchos telescopios para revelar la foto de una sociedad tan decadente, sobre todo en la ética, que es realmente lo que importa. Es paradójico que hayamos sido capaces de fotografiar un "trou-noir", que seguro que es diferente, y seamos incapaces de erradicar el hambre y la pobreza. Intentar la conquista de otros mundos cuando no hemos arreglado el nuestro es el principio del fin.