Billete de vuelta

La Zalia y la choza de los tres cerditos

Francisco García

Francisco García

Si a las comunidades autónomas españolas se les aplicara el informe PISA de la educación, Asturias suspendería cada curso, por llegar a los exámenes con los deberes sin hacer. Como ocurre con la enseñanza, dejada de la mano de Dios por culpa de reyezuelos de Taifas que la organizan a su antojo, los culpables de que esta región no pase de curso con holgura son varios, y no solo los políticos de aquí y de Madrid, pese a su inacción sonrojante. También la inexistente oposición de borrajas y los empresarios que no arriesgan y no mueven un dedo hasta ver si les cae una subvención. Mal asunto, plantearse un futuro halagüeño en un territorio subsidiado, cada vez más dependiente de las pensiones.

Abierta la variante de Pajares, ahora ponemos todas las miradas en la Zalia, un espacio entelequia a las afueras de Gijón que iba a convertirse en la panacea de todos los parabienes regionales. Aparte de metros cuadrados expropiados a los vecinos de San Andrés de los Tacones, ¿qué hay en esos terrenos urbanizados para un fin incumplido? Por no haber, no hay ni luz. ¿Cuántos años llevan instalando una subestación eléctrica que solo brilla por su ausencia? Lo que existe es una deuda multimillonaria que se asoma a los 150 millones de euros, enterrados en un secarral. Y a nadie se le cae la cara de vergüenza. El gran espacio de oportunidades no da ni para saldos. Otra vez la casa por el tejado, solo que esta vez la techumbre, pasados 15 años sin ladrillos ni cimientos, se vino abajo al primer soplido, como la choza de paja del primero de los cerditos. Sin dinero, sin mucho dinero, no habrá Zalia.

O sea, que la zona logística que iba a convertirse como por ensalmo o arte de magia en la plataforma líder del noroeste de España, consolidando a Asturias como eje fundamental del Arco Atlántico, ni tiene plata ni forma. ¿Cómo vamos a disparar el arco sin flechas? ¿Cómo va a funcionar el añorado nodo si mientras el Mediterráneo pinta el futuro de color de rosa aquí seguimos anclado en el Nodo, en el blanco y negro?

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