Formas de seguir (o no) la tractorada

La tractorada protesta de los ganaderos y agricultores asturianos la pasada semana en Oviedo dio para mucho. Lo primero para ellos, que se fueron a casa contentos porque el consejero de Medio Rural, Marcelino Marcos, les recibió y firmó atender sus peticiones. Habrá que estar pendientes si cumple y ver qué pasa con la siguiente protesta, con distintos convocantes, aunque también por lo mismo: la crisis del campo.

Lo que los asturianos pueden estar seguros es que los agentes del Cuerpo Nacional de Policía harán su trabajo y de forma impecable en estas movilizaciones y en cualquier otra. Así lo ha subrayado su propio jefe, Luis Carlos Espino, quien en vez de quedarse en su despacho –algo que sería de lo más normal– controlando desde la distancia el dispositivo de vigilancia desplegado durante la manifestación ganadera quiso hacerlo sobre el terreno, en persona. Lo hizo el jueves, cuando ante la sede de Presidencia hubo momentos tensos y algún enfrentamiento, y el viernes, cuando los ganaderos esperaron concentrados delante de la Consejería el resultado de la reunión que puso fin a su protesta. Allí se plantó Espino con su segundo de a bordo, Miguel Ángel Ramos. El jefe de la Policía Nacional se mostró satisfecho a preguntas de LA NUEVA ESPAÑA con el trabajo de sus agentes, estos agradecidos por el gesto, pero seguro que también algo nerviosillos por ese seguimiento tan de cerca.

Prefirió no seguir la protesta el consejero Ovidio Zapico (IU), quien en plena concentración ganadera se fue de la Consejería por la parte de atrás, la que da a la plaza de los Juzgados (le vimos desde los cristales). Sí salió por delante y se encontró la protesta de bruces la consejera Nieves Roqueñí, algo sorprendida al ver tanto policía y periodista entre ruido de cencerros. En directo la siguió Álvaro Queipo, diputado y secretario general del PP, que se tomó un café en la calle Uría entre tractores. Fue uno de los que acudieron a la manifestación del jueves, escoltado por muchos compañeros de partido. Sola, sin más escolta que los ganaderos que conoce, que son muchos, acudió la diputada de Vox Carolina López.

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