Llanes, Daniel BÁRBARA

Un grupo de usuarios de la piscina municipal de Llanes denunció ayer el mal estado de buena parte de los aparatos utilizados en el gimnasio, así como las inadecuadas condiciones higiénicas de los vestuarios y, en ocasiones, de las salas donde realizan sus ejercicios físicos. «No se realiza un mantenimiento de las máquinas y la mayor parte de los días los vestuarios se encuentran en unas condiciones higiénicas lamentables», aseguraron los denunciantes. Asimismo, estos usuarios solicitaron la ampliación del gimnasio, para evitar la masificación. «Debido al aumento considerable del número de socios, el gimnasio se ha quedado pequeño. Hay pocas máquinas y los espacios son muy reducidos, por lo que en muchas ocasiones la espera para utilizar alguno de los aparatos se hace eterna debido a las colas que se forman», señalaron.

Primero, los denunciantes trasladaron sus quejas a los trabajadores de la piscina municipal de Llanes. Después, tras comprobar que las instalaciones seguían en las mismas condiciones, varios usuarios decidieron recoger firmas para formalizar una denuncia conjunta. En total, 25 usuarios de la piscina municipal sellaron sus firmas, con sus correspondientes números del carné de identidad (DNI), en una hoja de reclamaciones. La piscina suma alrededor de 1.500 usuarios.

Los denunciantes indicaron que su único propósito es realizar sus ejercicios físicos con todas las garantías físicas y saludables, y contar con un volumen de aparatos físicos adecuado para atender la demanda. Los socios de la piscina municipal de la villa pagan una cuota mensual de 23,50 euros, pero si fuere necesario «no nos importaría que subieran la cuota», señalaron.

Los denunciantes enumeraron las deficiencias en el que se encuentran algunas de las máquinas. El gimnasio cuenta con dos cintas de «footing». Una de ellas, según un portavoz del grupo de usuarios, permaneció tres semanas averiada. «En cuanto se enteraron de la recogida de firmas, solucionaron el problema», matizó. La sauna de los vestuarios masculinos permaneció averiada, según estos usuarios, durante los últimos tres meses. Es más, los denunciantes aseguraron que algunos cables de las máquinas de peso se han ido desgastando, por lo que carecen de una seguridad mínima para elevar ciertos pesos. Por último, el grupo de usuarios denunció que el agua de la piscina no tiene la temperatura adecuada.