"Seguimos igual, los escritos denunciando las irregularidades en el servicio de la Policía Local no cesan. Esto se está volviendo imposible, así no se puede trabajar". Son palabras de un agente de la Policía Local de Llanes, que ayer corroboraban varios de sus compañeros, tras denunciar graves deficiencias en el operativo policial de una carrera pedestre disputada días atrás en la localidad de Nueva. Los agentes se quejan de que sus denuncias no están siendo atendidas por el alcalde, Enrique Riestra.
El relato de las deficiencias en el operativo de la competición comienza señalando que los agentes destinados a Nueva no contaban con una programación del operativo y solo recibieron, junto a la hoja de novedades, los horarios de las distintas pruebas a disputar.
Los agentes desconocían los itinerarios, la señalización, los desvíos alternativos "y todo cuanto es necesario para realizar el operativo con las mínimas medidas de seguridad. Así que los policías tuvieron que improvisar "sin contar con la mínima información". Cuando llegaron a Nueva se pusieron en contacto con la organización de la prueba para conocer los recorridos y los medios con los que se contaba. Los organizadores les facilitaron los mapas con los tres recorridos previstos y los horarios.
Al revisar los circuitos, los agentes se percataron de que no existía señalización alguna que prohibiera estacionar a lo largo del recorrido, salvo "unos folios pegados en algunas fachadas con la leyenda 'no estacionar prueba deportiva'", que no obligaban a los conductores, "más allá de su buena voluntad". En dos de los tres recorridos había vehículos estacionados, "con el consiguiente peligro para los corredores, no solo por constituir un obstáculo", sino porque podrían "iniciar la marcha durante el desarrollo de la prueba.
En el circuito de mayor longitud no existía señalización o balizamiento que separara los corredores del tráfico rodado. En el tramo de Nueva a Obiu no se señalizó la prohibición de estacionar, ni se colocaron conos. Los agentes ni siquiera sabían si iban a acudir efectivos de Protección Civil, y tampoco contaban con medios para comunicarse con ellos, por lo que la coordinación durante la prueba resultó "precaria, por no decir imposible".
Los agentes denuncian lo "complicado" que resulta que trabajar en esas condiciones y resaltan que tuvieron que asumir responsabilidades que no les corresponden e "improvisar sobre la marcha", esperando que no se produjera "ninguna desgracia". Además, tuvieron que soportar "reproches y quejas" de vecinos y visitantes por la falta de señalización e información. "Esta situación viene siendo habitual en los actos desarrollados en el concejo". Los agentes las "capean" con "buena voluntad" y "una profesionalidad" que "es cuestionada un día sí y otro también", señalan.
Los agentes detallan una larga lista de demandas para próximos eventos, como conocer los recursos humanos, policiales y de otras entidades que van a participar; horarios; recorridos; comunicaciones a usar; identidad y medio de contacto de los organizadores; señalización necesaria y su colocación previa; persona responsable del operativo que ha de coordinar a los agentes; puesto que ha de ocupar el personal asignado al evento e instrucciones sobre su labor; recursos materiales necesarios y disponibles, desvíos para el tráfico rodado y volumen de participantes.
