Ante numeroso público, la llanisca localidad de La Pereda celebró por todo lo alto la fiesta en honor a Nuestra Señora de Guadalupe.

Los dos ramos repletos de roscos de pan y decorados con los colores de las banderas de México y España salieron del Cuetu la Cruz pasado el mediodía. Ambos fueron donados por las familias Bustillo y Fernández Sordo. Encabezaba la comitiva Julián Herrero a la gaita, y su hermana Conchita al tambor. Celia Noriega tocó el tambor que dirigía al medio centenar de aldeanas. En la iglesa, el coro de Parres interpretó la misa asturiana de gaita.

La procesión con el cuadro de la Guadalupe y el estandarte recorrió el pueblo y el cántico del ramu antecedió a la reverencia ante la imagen de la Virgen, a la que siguió la interpretación del pericote por parte de la familia Cea. Siguió la subasta de los ramos y la danza prima entre los castaños de la vega de la Pereda.