Los contenidos de las canciones sirven muchas veces para perpetuar arquetipos viriles de poder, dominio y supeditación de la mujer, que vive para y por agradar el deseo del varón. Esa fue a la conclusión a la que llegaron ayer los participantes en el taller que el Colectivo de Mujeres de Piloña organizó en Infiesto, en vísperas de San Valentín, con el fin de reflexionar sobre el concepto de "amor romántico". La actividad estuvo tutelada por la enfermera Cruz Gutiérrez, la médica Dolores Montes y la psicóloga Carolina Carmona, quienes quisieron derribar mitos patriarcales como que los celos o el control son buenos en una relación. Las organizadoras insistieron en que no se trata de demonizar canciones o artistas sino simplemente de sembrar un pensamiento crítico, especialmente entre los más jóvenes.
"La idea de amor romántico entró en escena en el siglo XVIII con novelas basadas en la desigualdad de poder entre sexos y sigue muy presente hoy", advirtió Carmona. Los asistentes analizaron algunas letras populares como "La minifalda" de Manolo Escobar y otras más modernas como "Toda" de Malú o "Sin ti no soy nada", de Amaral.