Que el entorno de la playa de Toró reciba mucha más atención por parte del Ayuntamiento de Llanes. Eso es lo que vecinos y empresarios de la zona reclaman al Consistorio. Consideran que las inmediaciones del arenal, uno de los principales atractivos turísticos de la villa, necesita más cuidados por parte de los servicios municipales de limpieza. Creen necesario la limpieza periódica de maleza y hierba que invade aceras, caminos y aparcamientos.
El pequeño mirador que al bajar en dirección a la playa de Toró desde la avenida del mismo nombre se ubica en la parte izquierda luce desde hace meses abandonado. En una parte del mismo la hierba no deja ver la valla que separa este espacio del acantilado.
"Es una pena, pues es un lugar muy bonito al que se asoma mucha gente para sacar fotos de la playa", dice un paseante. "Tampoco pedimos nada raro. Solo que de vez en cuando limpien la zona", asegura Eloína Borbolla, del Restaurante Mirador de Toró. El citado mirador y la zona verde del aparcamiento de la playa de Toró donde las malas hierbas alcanzan la altura de una persona son los lugares que, según los lugareños, más limpieza necesitan de casa a Semana Santa, así como las inmediaciones de la playa de Puertu Chicu. "En el aparcamiento limpian de octubre a octubre si acaso. Sin embargo en los alrededores del puesto de la Cruz Roja está siempre limpio", dice otro vecino. La gente que vive, trabaja en la zona, o simplemente pasa a diario por este lugar caminando, sostienen que de nada sirve que ahora, antes de las vacaciones, se acicale el entorno si de cara al resto del año no hay luego un mantenimiento periódico. "Lógicamente en Semana Santa y en verano por aquí viene muchísima gente, pero también el resto del año. Pagamos los mismos impuestos que los que viven, por ejemplo, donde el Sablón, y allí se siega y se limpia cada poco", señalan.
El presidente de la Asociación de Vecinos Barrio Bustillo Llanes Este, Pedro Morán, considera que los aproximadamente 1.000 vecinos que viven entre la zona de la calle Nueva, San Antón, el Barriu Bustillo, la Avenida de la Guía y la de Toró, merecen más atención por parte de los políticos locales. La escasez de papeleras, que una farola en más estado no tarde meses en ser sustituida o que se tenga en cuenta las consecuencias de las decisiones que se toman a la hora de regular el tráfico en el centro de la villa y que repercuten en los vecinos de esta parte de la capital, son algunas de las reivindicaciones del colectivo.
