La llamada brecha digital "afecta tanto a los vecinos como a los negocios, especialmente turísticos, agravando el problema del despoblamiento". Lo dijeron ayer en Vidosa (Ponga) los diputados del PP José Felgueres y Cristina Vega, que acudieron a la localidad para reunirse con empresarios del concejo y con la cabeza del partido en el concejo, Gabriel Iglesias. No fue una casualidad visitar este concejo. Tal como denunciaron, Ponga es "ejemplo de municipio afectado por la falta de conectividad" por su escasa velocidad o la falta de cobertura. De hecho, apuntaron, "sólo el 18% de la población tiene acceso a 30 megas de internet", lo que supone, denuncian, "otra forma de desigualdad". Se suma así, explicaron, al gran problema de la zona rural asturiana -concentrada en las alas- donde el 64% de los concejos tiene menos de la mitad de su territorio con esa misma escasa cobertura.

En la región, lamentaron, "tenemos una brecha digital importante entre campo y ciudad". Los populares advirtieron de los graves perjuicios para el sector empresarial, "dificultando la propia gestión de las empresas y afectando de forma muy negativa a su competitividad, ya que la mayoría de los clientes exigen conectividad digital y servicio WiFi". En este sentido, anunciaron que su grupo parlamentario presentará una batería de iniciativas encaminadas a atajar este problema.