Los pescadores de Llanes van a perder un millón de euros por la falta de dragado en el puerto durante la campaña de la xarda, como mínimo. Es el cálculo del patrón mayor de la Cofradía Santa Ana, Ángel Batalla, muy enfadado con los plazos del Principado para realizar el dragado. Está previsto para después del verano. Batalla explica que los 25 barcos que suelen venir cada año para esa temporada no elegirán la zona portuaria llanisca porque no tiene calado y, por tanto, no pueden atracar si la marea está baja.
Fue el vicepresidente del Principado, Juan Cofiño, el que anunció el dragado del puerto llanisco. El político asegura que es una cuestión de cumplimiento de la ley y respeto de los plazos de contratación (el dragado lo tendrá que hacer una empresa externa porque "La Nalona" no cumple las exigencias ambientales). Ángel Batalla le recuerda que igual que durante el temporal se acometieron obras de emergencia en todas las carreteras de la red regional sin esperar plazos de contratación, se puede utilizar el mismo sistema en el puerto de Llanes. "Si perder una campaña como la xarda y registrar unas pérdidas cuantiosas en los ingresos de la cofradía no es una emergencia, no sabemos qué lo es", clama el marinero.
Si "La Nalona" pudiera actuar, el problema estaría solucionado a corto plazo. Pero no puede porque el fondo del muelle, según Demarcación de Costas, está contaminado con restos de mercurio, lo que impide dragar el sedimento y verterlo a la mar. Esto motiva que sea una empresa externa la que lo extraiga y lo vierta en los camiones para que lo trasladen a la planta de Cogersa, donde serán tratados.
Los pescadores, sin embargo, niegan la mayor. "Si está contaminado el puerto están contaminadas todas las playas, porque el sedimento que hay en el muelle viene de la mar; aquí no hay ninguna fábrica que pueda verter para localizar el fango en esta zona", explica el pescador. Batalla insiste, además, en que "nadie, desde un sillón, puede determinar que existe una contaminación u otra porque no son capaces de venir y hacer las cosas como es debido". Y, a su juicio, sería lo suyo valorar el nivel contaminante por capas. "El problema del muelle es que las mareas han traído arena, no es fango con mercurio, es arena la que se posa y nos impide atracar en bajamar", explica. Por eso, "sería conveniente que vinieran y miraran hasta dónde se puede extraer. Si a los dos metros ya se ve que hay ese nivel de mercurio que dicen, que paren y no extraigan más, pero al menos dos metros se pueden sacar porque son de arena que llegó este invierno con las mareas, y es arena como la de la playa", recalca. De seguir así, pronostica, no será difícil que alguno de los barcos acabe varando y volcándose por la falta de flotabilidad. "Y cuando un barco se dé la vuelta y empiece a verter los 8.000 litros de gasoil que lleva, entonces sí vamos a tener que hablar de contaminación, pero a nosotros no podrán culparnos porque se lo advertimos".
Por ahora, los barcos han de esperar a que la marea esté alta para poder atracar en el puerto. A veces esperan horas. Y se da otra circunstancia: la lancha de salvamento permanece amarrada en el muelle sur del puerto, una zona inutilizada por los marineros precisamente porque es el lugar donde más sedimento se concentra. "Si hay una emergencia con bajamar la lancha no podrá salir", advierten los marineros. Y eso, insisten, tampoco será porque no se lo anticiparon. El patrón mayor subraya que todo junto "hace que estemos sobre limitados y vamos a pagar las consecuencias por una decisión política".
El puerto de Llanes, uno de los más importantes en cuanto a ingresos de la región, "está prácticamente abandonado", apuntan los pescadores. La luz es otro de los problemas recurrentes que nunca se han solucionado "porque no miran para nosotros, nunca hemos tenido un alumbrado en condiciones y si hay una tormenta en Torrelavega, aquí nos quedamos a oscuras".
