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Los dulces 100 años de la heladera de Cangas de Onís

Luisa González, "La Machaca", celebra su siglo de vida con gran lucidez y viendo a pleno rendimiento su popular negocio

Luisa "La Machaca", en su domicilio de Cangas de Onís.

María Luisa González Caso, nació el 27 de agosto de 1920, por lo que acaba de cumplir un siglo de vida. Y con una gran lucidez. Se trata de uno de los personajes de Cangas de Onís, a la que todos sus convecinos conocen como Luisa, "La Machaca", quien durante dilatada vida laboral, desde principios de la década de los 60 hasta que le llegó el momento de su jubilación, endulzó los paladares más exigentes, tanto de oriundos como de forasteros, ya que estaba al frente de la heladería que llevaba por denominación "La Moderna".

Luisa, que disfrutó de la efeméride junto a su familia, era hija de Alfonso González, que regentó la carnicería "La Barata", en la Calle Mercado, al que todo el mundo conocía en Cangas por el mote de "Machaco", apodo proveniente de la afición que sentía por la tauromaquia y de manera especial por un matador de toros de principios del siglo XX: Rafael González Madrid, "Machaquito". Era tal la admiración que sentía por aquel torero cordobés que se quedó con el alias. Y de ahí que a Luisa la motejen, cariñosamente, como "La Machaquina". Además, sus hijos Julio y Luis, nietos de Alfonso, también asumieron dicho apodo.

Allá por septiembre de 1960 Luisa González Caso y su marido Julio Mollera Álvarez inauguraban en una tienda de ultramarinos y frutería, bajo la denominación social de "La Moderna". La máquina de elaboración de helados llegó en 1961, procedente de Francia, adquirida a través de la firma gijonesa Universal Eléctrica. Julio Mollera, era de Matanzas (Cuba), y se casó con Luisa en 1951, en la iglesia de Sames.

Como no podía ser de otra manera, los principios fueron difíciles, pues no había tanto turista, ya que el "boom" para ese sector ha de remontarse a la década de los 80 y 90, con el final de etapa de la Vuelta Ciclista a España y la visita de Juan Pablo II a Cangas de Onís y Covadonga. Tras mucho sacrificio el negocio fue saliendo adelante hasta hacerse un nombre propio en el oriente de Asturias, destacando sobremanera el exquisito "Peña Santa", la especialidad de la casa. Todo un llambión helado hoy en día en la ciudad de Cangas de Onís.

No obstante, el ideólogo e inventor del helado "Peña Santa", en base a tres gustos (vainilla, chocolate y nata), con capa de merengue cubierta de azúcar quemado, fue Ventura. Posteriormente, el hostal Eladia, que era la competencia al hotel Ventura, sugirió algo parecido para su clientela a "La Moderna", por lo que a los habituales ingredientes Julio Mollera les añadió tutti-frutti y fresa. Eso sí, "La Moderna" fue la primera heladería de España que comenzó a comercializarlo al público en general. En otros sitios se flameaba el helado, tal como hacían en el Hotel Pelayo de Covadonga.

Los hijos de Julio y Luisa se irían haciendo con las riendas de la heladería, la cual continúa a pleno rendimiento y más en estas fechas estivales, donde sobresale entre otras variedades el helado de arroz con leche. Otra exquisitez artesanal para disfrutar con las altas temperaturas en la antigua Cánicas.

Y entre tanto, la matriarca, Luisa "La Machaca" alcanzó los 100 años jovial y en plenitud, como si no pasasen por ella, con una memoria prodigiosa.

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