Los empresarios del Oriente se debaten entre la estupefacción y el enfado al conocer que el nuevo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del parque nacional de los Picos de Europa prohíbe la celebración de las carreras nocturnas, lo que significa que no se podrá celebrar la Travesera, una prueba que comienza a medianoche en los Lagos de Covadonga con final en Arenas de Cabrales. El auge de las pruebas de deporte extremo ha convertido la cita en una gran fuente de ingresos para la comarca, calculados en unos 170.000 euros en su última edición, la de 2019.

Saúl Pascual, presidente de Incatur, la asociación de empresarios de Cangas de Onís y de los Picos de Europa, asegura que hoy por hoy “no se conoce un informe técnico que avale esta prohibición”. Pascual, que representa a 250 socios bajo el paraguas de un colectivo con más de treinta años de historia, se muestra sorprendido por la nueva normativa.

“Todavía no conocemos exactamente los usos del parque”, dice. En este sentido, reclama más transparencia y, sobre todo, más claridad al Principado, quien debe velar por un uso “adecuado”, pero también hacer un ejercicio de escucha. “No sabemos si han preguntado a los interesados porque, por ejemplo, desde el Ayuntamiento de Cangas de Onís se promociona el turismo deportivo y una de sus expresiones es la Travesera”, apunta. Además, señala que el perfil del turista amante de la montaña y el deporte (algo que se busca, apunta, en todas las promociones que conoce), “tiene un poder adquisitivo medio y alto”, lo que repercute en beneficios directos para la zona.

También los empresarios de turismo de Cabrales se muestran “sorprendidos” y “enfadados”. El presidente de la asociación cabraliega, Sami Hammoudeh, asegura que esta prohibición “nos mata el mes de junio, así, sin más”. Hammoudeh entiende que la Travesera “atrae a centenares de personas, pero desde luego por el recorrido no pasan miles de personas, como ocurre en el Teide”. Además, indica que, de cara al sector, esta prueba es solo la punta del iceberg. “Antes muchos deportistas vienen un fin de semana a entrenar y eso nos genera ganancias”, destaca, y subraya el poder promocional de estas competiciones extremas: “uno de las fortalezas de la Travesera es que hace una labor promocional incalculable”. Y hace una reflexión para restar importancia al impacto de los participantes en la flora y la fauna: “¿Cuántas personas al día suben al Urriellu en verano?”.

Riqueza y promoción

El alcalde de Cangas de Onís, José Manuel González (PP), asegura que “cuando se organizan eventos en nuestros concejos, donde además de dar riqueza promocionan la zona, la administración debería dar facilidades y no poner trabas. Somos un municipio turístico y este tipo de actividades son muy importantes para toda la comarca”. El cangués fue el único de los regidores que votó en contra del nuevo plan en la votación celebrada en el Patronato. González defiende que la Travesera ha destacado siempre por “la preocupación, el cuidado y el respeto de la organización”.

La prohibición también pilló por sorpresa al alcalde de Cabrales, el socialista José Sánchez, que se abstuvo en la votación del nuevo plan rector. El regidor apunta que “el anterior plan no lo preveía y está catalogada como una carrera tradicional, por eso no esperábamos este desenlace. La carrera tradicional siempre se celebró por la noche. Hablaremos con el Principado, porque hacer la carrera diurna no garantiza la seguridad y tendríamos que cortar antes. Sería una pena quedarnos sin carrera por una cabezonada”.

“No es sitio para carreras, ni diurnas ni nocturnas”, dicen los ecologistas

Los ecologistas lo tienen claro: Estos parajes “no son para hacer carreras, ni diurnas ni nocturnas”. Así se expresa Javier Naves, representante de los conservacionistas en el patronato de los Picos de Europa. Naves defiende sin fisuras la prohibición de la prueba porque “un parque no es un lugar para hacer carreras masivas ni comerciales, para eso existen otros espacios en Asturias”. A su juicio, hay que respetar las propuestas de conservación y los usos tradicionales, como el ganadero. En cuanto a los efectos en el terreno de la carrera, señala varios: la erosión del terreno es uno de ellos. El efecto en los animales más activos por la noche también es directo e incuestionable, asegura.

Por su parte, la Coordinadora Ecoloxista de Asturias cree oportuna la medida del plan, si bien ve este instrumento como “un coladero”, advierte el portavoz, Fructuoso Pontigo. Asegura que “hay miles de lugares en Asturias para correr sin hacerlo por un parque que debe conservarse y protegerse”. Pontigo se muestra, en todo caso, desanimado porque la gente “busca el riesgo extremo a cualquier coste ambiental”. Pide más acciones conservacionistas, “como las de Somiedo”.