La Policía Nacional detuvo el martes a un gijonés de 46 años acusado de drogar a un ovetense el pasado 24 de julio para robarle en su casa 900 euros, un portátil, relojes y varios efectos personales más. El detenido cuenta es un preso en situación de tercer grado que cuenta con numerosos antecedentes "graves" y fue identificado gracias a las cámaras de seguridad de un garaje que le grabaron huyendo con el material sustraido.

La voz de alarma la dio un amigo de la víctima. Al ser incapaz de localizar a este, acudió a su casa y lo encontró desnudo e inconsciente. Tras llamar a los servicios de emergencia el hombre fue trasladado al HUCA.

Recibido el alta y de vuelta a casa, comprobó que faltaban cosas de su vivienda y procedió a denunciar los hechos a la Policía Nacional. En su testificación dijo que conoció al supuesto ladrón en la calle y tras entablar conversación tomaron algo juntos en dos establecimientos hosteleros. Luego acordaron ir juntos a su casa, pero el afectado no recuerda nada más.

Ante las sospechas de haber sido drogado, el denunciante realizó análisis clínicos que reflejaron un positivo por benzodiapecinas. La Policía emitió la orden de detención el día 3 de agosto. El acusado huyó de Asturias, pero el martes fue identificado y arrestado en un control policial en Torrejón de Ardoz.