Usuarios del autobús urbano denunciaron, en los últimos días, la saturación de varias líneas, especialmente en las horas punta de los días laborables, y reclamaron soluciones al Ayuntamiento para evitar posibles contagios de coronavirus. El grupo municipal de Somos se sumó ayer a dichas protestas y reclamó un paquete de medidas que incluyen el aumento de las frecuencias o las desinfecciones y ventilaciones frecuentes de los vehículos, a su juicio indispensables para garantizar la seguridad sanitaria.

Muchos de los denunciantes utilizaron sus perfiles de las redes sociales para hacer públicas fotos en las que pueden verse algunos autobuses de la empresa TUA llenos hasta la bandera en determinados servicios. Algunos comparan las imágenes con las registradas en el transporte público de grandes ciudades como Madrid y advierten del riesgo de que estas aglomeraciones se traduzcan en la aparición de focos de contagio en una ciudad que desde el inicio de la crisis sanitaria registra mejores datos que las otras dos ciudades asturianas.

Desde Somos, el edil Ignacio Fernández del Páramo presentó una serie de medidas, "con voluntad constructiva", a través de las que pretende atajar estas quejas. "En los autobuses se va con las ventanas cerradas y el aire puesto. Puede darse una alta concentración del virus en las líneas más concurridas", alerta Fernández del Páramo, quien advierte de la mala evolución de la pandemia en Oviedo en las últimas semanas. "Algunas medidas pueden ser impopulares, pero estamos en fase 2 y corremos el riesgo de saturar el sistema sanitario", sostiene.

Sobre la financiación de los cambios sugeridos, el edil de Somos admite que "cuestan dinero", pero cree que se debe "recurrir a la deuda si es preciso" para "actuar con celeridad" y evitar un empeoramiento de la salud pública.