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Oviedo se queda sin circuito mundial de pádel: el torneo queda aplazado hasta frenar al covid

“La idea de organizar el torneo este año está casi descartada”, dice Conchita Méndez, que quiere aprovechar la cita para atraer 15.000 visitantes

Un partido del torneo del circuito mundial de pádel celebrado en el Palacio de los Deportes de Gijón hace cinco años. Juan Plaza

Los aficionados al pádel deberán esperar más de lo previsto para poder ver a sus ídolos en acción en Oviedo. La concejala de Deportes, Conchita Méndez (PP), dio ayer pocas esperanzas de que la prueba del circuito mundial prevista para esta primavera en el Palacio de los Deportes pueda celebrarse. “La idea de organizar el torneo este año está casi descartada”, indica la edil, que ve inviable la celebración del evento mientras siga habiendo restricciones sanitarias y limitaciones de aforo en los recintos deportivos locales.

El Consistorio ovetense acordó con los organizadores del circuito –integrado por 700 jugadores profesionales de más de 20 países– convertirse en sede de uno de sus torneos de primer nivel con la aspiración de llenar las gradas del Palacio de los Deportes a diario durante una semana para los partidos de la fase final. La previsión era atraer a 15.000 visitantes a la ciudad durante esos días, pero la imposibilidad de cumplir esas expectativas ha llevado a Conchita Méndez a posponer el evento sin reservar ninguna fecha, al menos hasta que cesen las restricciones sanitarias relativas a los eventos multitudinarios.

Se trata de la segunda ocasión en la que se aplaza la prueba. Los planes municipales pasaban por celebrar la primera edición del torneo ovetense del World Padel Tour –nombre oficial del circuito– entre el 11 y el 17 de mayo del año pasado. Sin embargo, el decreto del estado de alarma aprobado en marzo por el Ejecutivo de Pedro Sánchez y la inesperada crisis sanitaria llevaron a ambas partes a aplazar la cita para mayo de 2021, confiados por aquel entonces en que la pandemia ya habría pasado a la historia para estas fechas.

Ahora, el Ayuntamiento ha optado por una postura más conservadora. Conchita Méndez sigue queriendo llevar a la capital asturiana la prestigiosa prueba, pero no habrá nuevo calendario hasta superar la incertidumbre generada por el virus. “La prueba está aplazada ‘sine die’”, explica la edil popular, subrayando que, aparte de la importancia deportiva, el equipo de gobierno local aspira a convertir estos grandes eventos deportivos en un reclamo turístico.

Fuentes del equipo de Méndez van más allá y extienden esta suspensión a todas las grandes pruebas que se han ido aplazando de manera sistemática desde marzo del pasado año. La segunda edición de la Farinato Race y la celebración de algunos campeonatos nacionales e internacionales de distintas disciplinas son algunos de los ejemplos de “reclamos” que siguen en manos de la evolución sanitaria.

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