La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Triste adiós a Carlos Novoa, la voz todoterreno de la radio asturiana

“Era muy generoso y se hacía querer”, subraya José María García sobre el popular locutor musical y deportivo que dirigió Radio Vetusta

Carlos Novoa, en una imagen de archivo. LNE

La voz todoterreno de la radio asturiana se apagó al mediodía del Sábado Santo. Carlos Novoa, el popular locutor que triunfó en la música y el deporte y que durante casi tres lustros dirigió el proyecto municipal de Radio Vetusta, se vio sorprendido en la ducha de su vivienda por un fulminante infarto, solo una semana después de celebrar, rodeado de la familia, su 63.º cumpleaños. Los sanitarios no pudieron hacer nada por salvarle y a la confirmación del fallecimiento siguió una ola de conmoción que se fue extendiendo por Oviedo y toda Asturias en forma de fatídica noticia, provocando un aluvión de reacciones cariñosas y reconocimiento. “Estoy muy impresionado, era muy generoso y se hacía querer”, declaraba José María García, el rey de las ondas, tras conocer por LA NUEVA ESPAÑA la pérdida del que fuera integrante de su equipo durante casi 20 años.

Novoa deja viuda, Regy Cancelas, y cuatro hijos, Carlos, Diego, Marco y Luca, así como un gran legado profesional cosechado durante más de cuatro décadas viviendo por y para las ondas. “Nació para la radio, a los dos minutos de ponerse en la mesa de control ya demostró su desparpajo y el talento que tenía para esto”, indica el también locutor Alberto Toyos, pionero junto a Novoa en la radio fórmula, con la llegada de Los 40 Principales al Principado en 1980.

Tras demostrar su talento en programas de tres horas presentando discos, el periodismo deportivo llamó a su puerta. José María García apreció gran capacidad y lo reclutó para el equipo con el que lideró durante décadas la radio deportiva. “Jamás me dijo que no a nada por muy difícil que fuera lo que le estaba pidiendo”, rememora sobre las distintas etapas en las que trabajaron codo a codo, en Antena 3 Radio, Cope y Onda Cero.

García no escatima elogios para el periodista carbayón. “Fue un compañero con el que cualquiera trabaja muy satisfecho y feliz de haberlo encontrado. Profesionalmente era un hombre no vulgar”, apunta sobre Novoa, con quien había hablado “quince días antes” sin sospechar ni lo más mínimo que aquella sería su última conversación.

El fallecido recibió en 1993 el encargo de pilotar el proyecto municipal de Radio Vetusta, aventura que se alargó hasta 2008 y le permitió confirmarse como un referente en la información local. “En el año 1997 y 1998 el EGM llegó a darle 20.000 oyentes a pesar de que su información se limitaba a Oviedo”, cuenta Ignacio Fernández, productor con el que Novoa se animó a emprender tras la decisión del Ayuntamiento de poner punto y final a Radio Vetusta y con el que antes, junto a Simón Fernández, conformaron un exitoso triángulo coprotagonizando las tertulias deportivas “Crónica Azul”, con las que mantuvieron muchas horas pegados a la radio a miles de aficionados oviedistas durante muchos años.

El alcalde, Alfredo Canteli, se sumó a las condolencias reivindicando el papel del periodista en el panorama radiofónico asturiano e incluso nacional. “Lamento profundamente el fallecimiento de Carlos Novoa. Se ha ido un buen amigo, una persona que quería mucho a Oviedo y un gran oviedista. Director de Radio Vetusta, Carlos ha sido un verdadero referente de la comunicación radiofónica de nuestra ciudad, de Asturias y de nuestro país, porque su voz traspasó las fronteras de nuestra Comunidad. Descanse en paz”, publicó Canteli en redes sociales.

A pesar de sus 63 años, Novoa seguía muy activo. Entre sus últimos trabajos destacó el programa “Oído cocina”, de la RPA, en el que abordaba la gastronomía a través de entrevistas a invitados, entre los que estuvo José María García. “No tuvo en sus últimos tiempos excesiva fortuna. Supo arreglar un poco su vida trabajando absolutamente de todo”, dice “Supergarcía” sobre la última etapa profesional del que fuera su leal colaborador.

Aunque se hizo un nombre a nivel nacional en su etapa dorada como narrador deportivo, sus colegas coinciden en valorar especialmente su capacidad de adaptación a todos los formatos. Además de sus inicios en la música, Novoa dirigió la comunicación del Colegio Oficial de Abogados de Oviedo tras su etapa en Radio Vetusta, emprendió fugazmente con éxito en el mundo de la producción y hasta se adentró en el mundo del doblaje cinematográfico. “Fue un fenómeno, para mí fue uno de los que mejor radio hacían de España y me apena que nunca llegase a tener un programa propio a nivel nacional”, indica Javier Blanco, el veterano periodista musical ya jubilado, que cumplió la mayor parte de su carrera en LA NUEVA ESPAÑA. Solían coincidir en Vallobín. “Era un cachondo, un tío muy simpático y que echaremos mucho de menos”, declara Blanco, visiblemente afectado.

A pesar de acaparar durante años los micros, así como las cámaras a través de televisiones locales, quienes le conocían aseguran que Carlos Novoa era un hombre muy discreto e incluso “tímido” al que no le gustaba figurar ni estar en el candelero. Es quizá por eso por lo que la familia, todavía en proceso de digerir el inesperado deceso, ha decidido organizarle una despedida profundamente íntima. Según ha podido saber este diario, la familia tiene previsto incinerar esta mañana el cuerpo.

La consternación fue palpable especialmente en las redes sociales en las que el locutor era muy activo y algunos de sus últimos comentarios se convirtieron en un muro de condolencias. Es el caso de la publicación que hizo el pasado 9 de abril, día de su cumpleaños con los siguientes comentarios: “Hoy cumplo 63. Me siento bien. Orgulloso de mi vida. Feliz de tener a mi mujer, a mis hijos, a mi familia, a mis amigos... Consciente de lo efímero que resulta todo y de lo importante que es disfrutar del momento, del instante, de las pequeñas cosas, del presente... Brindo por la vida”, escribió hace solo una semana la voz todoterreno de la radio asturiana, cuando todavía no sabía que su corazón le jugaría una mala pasada, impidiéndole disfrutar del derbi del fútbol asturiano que tanto esperaba.

Compartir el artículo

stats