Mónica Suárez Rueda: "Esta novela es una forma de reivindicar a mi madre"

El Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA acogió ayer la presentación de "Las heridas del alma", novela que relata la vida de Cova y Mino, una historia tan dura como real que dibuja la biografía de Mónica Suárez Rueda y su madre, ambas supervivientes de la violencia de género.

El libro cuya portada corrió a cargo de César Frey, "El Séptimo Crío", artífice del mural que presidió la fachada de la redacción de LA NUEVA ESPAÑA, revela las vivencias de violencia, dolor y ausencias sufridas durante 52 años a manos del padre y marido.

"Tras diez borradores, todos tirados a la basura, acabé lanzándome en el decimoprimer intento. Era algo que debía a mi madre", explicó la autora emocionada. La novela es una llamada de atención, poner la lupa sobre una "lacra que en los cincuenta y sesenta era completamente normal".

Tras ocho años y "mucha terapia", la obra se presenta como una especie de ejercicio sanador. "Era mi forma de reivindicar a mi madre como lo que es, una heroína, y de manifestar mi compromiso con todas las víctimas que como ella siguen viviendo el infierno de los malos tratos". A lo largo del proceso de escritura, asegura haber pasado por multitud de emociones, desde la irá a la rabia e incluso la alegría. "Mi madre no nos educó a mis hermanos y a mí en el odio o el rencor, sino en el amor, a pesar de todo lo vivido".

El acto, presentado por el escritor Ángel Luis Rubio García, estuvo marcado por los aplausos de un público que asistió conmocionado a la descripción de una historia áspera, fruto de una realidad "que aún existe".

La costumbre convertida en resignación, no acaba, sin embargo, en un final trágico. "Aunque difícil de creer, la novela cierra con el perdón, no con rencor. Porque a veces, duelen más las cicatrices que las heridas del alma".