El Ayuntamiento de Oviedo prepara una ordenación de las viviendas turísticas que se alquilan por internet y que ayuden a controlar su crecimiento, que en los últimos años se ha disparado en la capital asturiana. Según los últimos datos que maneja el Instituto Nacional de Estadística (INE), en la ciudad hay 665 pisos para turistas, unos doscientos de ellos en las calles aledañas a la Catedral. En conjunto, suman una oferta de 2.800 camas, que son tantas como las que tienen los hoteles de cuatro estrellas repartidos por la ciudad.
Ante este incremento, agudizado en estos dos últimos años, la concejalía de Turismo, que dirige Alfredo García Quintana, está llevando a cabo un estudio para conocer cuál es la situación real de estas viviendas. El informe lo está desarrollando junto a la patronal asturiana de las empresas tecnológicas, el Clúster TIC, y la Universidad de Oviedo.
Quintana asegura que "las viviendas de uso turístico han venido para quedarse, su uso es una demanda del viajero que debemos tener en cuenta". Ante ese escenario, el objetivo del consistorio es el de ordenar este sector, controlar su crecimiento, así como garantizar la convivencia y la competencia legal entre los diferentes tipos de alojamientos que conviven en la ciudad.
Como el crecimiento es imparable, el consistorio quiere crear una comisión en la que implicar a todos los agentes del sector para tomar las decisiones más adecuadas sobre el impacto de las viviendas de uso turístico. "El reto es el de regularlas, pero con conocimiento. Su integración en la vida de la ciudad excede lo meramente turístico, es también materia de urbanismo, de ordenación urbana y de otras áreas del Ayuntamiento", explica Quintana, "y, por otro lado, la normativa que regula los derechos y obligaciones de las viviendas turísticas es competencia del Principado".
En esa comisión, el consistorio quiere tener el punto de vista del sector privado porque, señala el concejal, "las viviendas de uso turístico no deben suponer una competencia desleal para el resto del sector ni tampoco causar perjuicios a los vecinos de Oviedo".
Pero antes de ponerse manos a la obra con este incipiente sector el Ayuntamiento asegura que necesita tener datos reales para ver la magnitud de la presencia de las viviendas turísticas en la ciudad. Más reales que los del INE que, según algunas fuentes, son solo la punta del iceberg. El estudio elaborado por el instituto nacional es una estadística experimental que obtiene información utilizando la técnica del "web scraping". Con la ayuda de "software" especializado, los técnicos del INE extraen los datos de las plataformas de internet más utilizadas para ofertar alojamientos turísticos en España y mediante algoritmos eliminan las duplicidades. Los expertos entienden que así solo aflora una pequeña parte de este mercado que está en auge. Por eso Quintana asegura que "en esa tarea (la de conseguir unos datos más reales) es en la que estamos trabajando con el Cluster TIC de Asturias para realizar un estudio del impacto del uso de las viviendas de uso turístico. Y que complementaremos con la implantación de un sistema de inteligencia turística que rastrea las plataformas de alquiler de viviendas turísticas más utilizadas en España".
Quintana está convencido de que "con todas estas iniciativas, las cuales ya estamos poniendo en marcha, lograremos tener una radiografía clara del caso concreto de Oviedo, ordenar el sector. Y muy importante, enriquecer la oferta turística del destino y garantizar la seguridad y que se cumplan derechos de los viajeros que apuestan por ese tipo de alojamientos. Y garantizar al usuario un servicio acorde con un destino que no para de crecer y que apuesta de una forma clara por la calidad".
Según señala el INE, en suelo carbayón hay ahora 163 viviendas de uso turístico más que las registradas en agosto de 2020 cuando comenzaban a relajarse las medidas para intentar frenar la pandemia y el trasiego de visitantes nacionales despertaba del obligado letargo del encierro. Solo en el centro de la ciudad, hay ya doscientos de estos pisos. El número de plazas va, poco a poco, acercándose al que ofertan los hoteles de cuatro y cinco estrellas en conjunto. Son 2.800, prácticamente las mismas. Hasta ahora, la explosión de la vivienda turística estaba muy centrada en la costa, pero de un tiempo a esta parte, la capital asturiana está liderando el despegue del sector en la región, con cifras de récord de visitantes.
La zona del antiguo es la que, lógicamente, concentra una mayor parte de viviendas en alquiler para uso turístico, según los mapas de calor elaborados por el INE. Sin embargo, la que está junto a Los Prados es otra de las zonas con más oferta. Una zona de la ciudad que tiene como gran reclamo turístico la iglesia de Santullano, a tiro de piedra. Solo en esa franja entre los comercios y el hospital hay una treintena de viviendas para turistas. Las principales zonas del Antiguo, las calles que rodean al Campillín, la plaza de la Escandalera y algunas del Campo San Francisco aparecen señaladas en ese semáforo en un tono anaranjado.