Un conductor ebrio empotra su coche contra una peluquería en Cuatro Caños

Testigos afirman que el vehículo recorrió varias calles dando tumbos mientras una mujer que iba de copiloto intentaba tirarse en marcha

Los bomberos realizando labores para retirar el coche empotrado contra la peluquería. | LNE

Los bomberos realizando labores para retirar el coche empotrado contra la peluquería. | LNE / Lucas Blanco

Impresionante accidente en uno de los puntos más conocidos de La Corredoria. Un conductor ebrio empotró su coche contra la cristalera de una peluquería situada en la emblemática plaza de los Cuatro Caños. Según varios testigos, el conductor comenzó a dar tumbos en la avenida del Mar mientras su copiloto, una mujer, trataba de abrir la puerta del coche para lanzarse en marcha. La rocambolesca situación desembocó en una extraña maniobra que terminó con el turismo, un Renault Megane negro, chocando contra el escaparate y haciendo saltar los airbags. Los ocupantes resultaron ilesos y el piloto dio 0,71 miligramos de alcohol por litro de aire espirado en el control de alcoholemia, según fuentes implicadas en el suceso.

Los hechos tuvieron lugar poco antes de la una de la madrugada del domingo, en plena gran noche del carnaval ovetense. Algunos taxistas dijeron haberse visto sorprendido por un vehículo "haciendo un alarde de conducción temeraria" por la zona de la avenida del Mar. Al parecer, el vehículo iba de un lado al otro de la calzada y, entretanto, la puerta del copiloto se abría y cerraba.

La escena se prolongó hasta la altura de la plaza de la Fuente de los Cuatro Caños, donde el coche coincidió dentro de la glorieta contra una furgoneta y, por circunstancias que se desconocen, se desvió hasta estrellarse contra una cristalera de 7,5 metros cuadrados de superficie. "Venía a gran velocidad, se subió a la acera y, a pesar de ser muy ancha, la atravesó hasta acabar empotrado contra la peluquería", relataron algunos de los presentes.

A la zona se trasladaron efectivos de bomberos, sanitarios y la Policía Local. Para cuando llegaron, la joven que iba de copiloto se había ido corriendo, pero posteriormente volvió al lugar de los hechos porque, al parecer, se había dejado las llaves de casa en el interior del vehículo.

El varón, "que tendría menos de 40 años", según los presentes, se sometió a la prueba de alcoholemia, arrojando un resultado de 0,71 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, por lo que tuvo que ser detenido para declarar por un supuesto delito penal.

A pesar de la violencia del impacto el vehículo no llegó a acceder al interior del local. "La fachada absorbió buena parte del golpe, pero los destrozos son considerables", se lamentaba ayer la titular de la peluquería, todavía tratando de encontrar consuelo por la faena que provocó el accidente en su negocio.

El suceso acaparó muchas conversaciones durante la jornada del domingo y este lunes en el que no faltaron comentarios jocosos sobre la plaza de Cuatro Caños como escenario de accidentes tan rocambolescos como el del domingo o el protagonizado por H. C., uno de "los mayorinos" del Angliru, que arrasó con su coche la fuente protegida de la plaza el 13 de junio de 2019. "Habrá que cambiar el nombre de Cuatro Caños por el de la plaza de los Cabras Locas", bromeaba ayer un vecino de la zona.

Suscríbete para seguir leyendo