Santa Bárbara formalizó desde diciembre 67 contratos fijos, en su mayoría de soldadores y caldereros

Los macrocontratos firmados por Santa Bárbara con el ministerio de Defensa para la construcción de vehículos de combate siguen dando sus frutos en forma de empleo estable. La compañía armamentística, titular de la fábrica de armas de Trubia, firmó desde el pasado diciembre 67 contratos indefinidos, de los que tres cuartas partes correspondieron a soldadores y caldereros, que hasta ahora eran requeridos mediante contratos temporales.

Esta medida, incluida entre los compromisos del convenio laboral acordado el pasado año por la compañía y los sindicatos, persigue el doble objetivo de consolidar trabajo fijo y rebajar la edad media de la plantilla de una empresa que, sin ir más lejos, en diciembre homenajeó a 180 trabajadores que llevan 40 años desarrollando su carrera en la villa cañonera.

Con el objetivo de seguir avanzando en este proceso de rejuvenecimiento, Santa Bárbara ha puesto en marcha acuerdos de colaboración con cuatro centros de Formación Profesional (FP) de la región, dirigidos a captar futuros trabajadores cualificados para las instalaciones trubiecas.

La escasez de ingenieros es una problemática patente en todo el país. Sin embargo, empresas del sector de la defensa como Santa Bárbara han encontrado en determinados ciclos formativos de grado medio y superior una potencial cantera. De momento, la empresa ha puesto sus ojos en los institutos gijoneses de La Laboral y Fernández Vallín, así como en los centros de Valnalón (Langreo) y Sánchez Lastra (Mieres).

Entre los fines de esta colaboración es trasladar a los alumnos las atractivas salidas laborales que ofrece la industria de la Defensa, más allá de perfiles profesionales como los de ingenieros, soldadores o caldereros. Los técnicos superiores de distintas materias como Electrónica o Electrotecnia, entre otros, son cada vez más demandados y se adaptan a la perfección a las necesidades de unos procesos de selección cada vez más informatizados y digitalizados.

Paralelamente, Santa Bárbara mantiene contactos con la Universidad de Oviedo para tratar de incrementar el número de plazas de las promociones de las ingenierías, si bien ambas partes detectan que la raíz del problema está en el decreciente interés mostrado por los jóvenes en este tipo de estudios.

Otra vía de captación de personal son los programas puestos en marcha por el gobierno del Principado para tratar de retornar talento asturiano. Actualmente, existe una nutrida representación de técnicos asturianos muy cualificados repartidos por otras regiones españolas y países de todo el mundo. Los esfuerzos de la empresa y la administración regional se orientan a intentar convencer a estos profesionales para que continúen con sus carreras en su tierra.

Las perspectivas de futuro de la fábrica de Trubia son muy positivas. El contrato de 2.000 millones de euros firmado hace cuatro años para fabricar 348 vehículos 8x8 «Dragón» para el ministerio de Defensa, unido a otro encargo milmillonario de 394 Vehículo de Apoyo a Cadenas (VAC), garantizan la carga de trabajo de la planta trubieca hasta al menos el año 2036. Estos dos programas unidos al de suministro de vehículos «Ajax» desde 2014 a Reino Unido, suponen los tres principales pilares de la intensa actividad actual de una fábrica que genera un millar de empleos.

Suscríbete para seguir leyendo